29 marzo 2024

Con muchos problemas en el sonido (ellos parecían no poder oírse por los monitores) y un retraso curioso comenzó la actuación de los teloneros Diploide. El dúo local realizó como pudo su espectaculo defendiéndose dignamente con sus bases pregrabadas, que giran en torno a la electrónica suave con toques de percusión latina, sobre las que un teclado, una caja de ritmos y una voz en la onda hip-hop dan el toque final.

Disculpando las malas condiciones con buen humor, la sala estaba llena de fans y amigos que conocían las extrañas letras al dedillo y no pararon de corearlas y bailar, aunque la impresión es que su propuesta se queda un poco corta en cuanto a letras -puede que no sea el objetivo, pero algunas dan vergüenza ajena-, bases poco originales, deudoras en algunos momentos del idealismo pop de Junior Senior o los grandes Avalanches y bases latinas que más bien tendían al puro pachangeo simplista.
Un momento destacado de su actuación fue el número con el que se despidieron, un reggaeton a pachas con Joe Crepúsculo, en el que entre la tontería y el ritmo acelerado que le metieron quedó muy majo y halló la aprobación del público.

joe-crepusculo-en-cafe-teatroLlegó ya el momento del artista principal que no tuvo también pocos problemas para comenzar con los monitores y el sonido en la sala lo que hizo retrasar bastante su comienzo. Eligió uno de sus himnos más reconocidos “El día de las medusas” para abrir el concierto, dándonos exactamente lo que íbamos buscando: electro pop lo-fi chirriante con el que nos metió en su bolsillo.
Sonaron también “gabriela”, “amor en tiempos de democracia”, “suena brillante” o “la cancion de tu vida” en un set que combina lo mejor de sus dos discos del 2008 pero no sobrepasó la hora de duración.
Deleitándonos con estas canciones de amor perennes, como él mismo dijo, vimos a un Joe exultante con su organillo -del que rompió una tecla casi al final del concierto para aumentar el pequeño desastre técnico por el que habían pasado-, exhibiendo ese sentido del humor casi casposo tan especial que tiene, acompañado por Sergio Telematico que se hacía cargo de la caja de ritmos y de un sintetizador vintage ms-20, un elemento de los más característicos en su sonido.

Después de una berreada versión del “Para Elisa” se despidió con un “No hago otro bis, que ésto suena muy mal y luego criticáis todos en vuestros blogs al tio ese que venia de la gran ciudad” dio por finalizado este espectaculo desastrosamente delicioso donde el publico se rió lo que quiso y tuvo una respuesta increíble cantando y coreando previa petición o espontáneamente.
Pero Joe, si ya sabíamos lo que íbamos a ver y ademas nos estaba encantando, no te disculpes y sigue dándole al teclado hasta que rompas todas las teclas!

19 comentarios en «Crónica Joe Crepúsculo en el Café Teatro»

  1. Hola. Si no os gusta DIPLOIDE me parece perfecto, pero deberíais mostrar un poco más de respeto a la hora de escribir sobre ellos o sobre cualquier otro grupo. Esto no es serio.

  2. Pues yo no creo que se falte al respeto a nadie leyendo este artículo, la verdad… es sólo una opinión subjetiva de alguien que asistió al concierto por lo que veo. Yo no pude ir y no puedo decir si es verdad o no, pero me parece muy triste que se meta toda la “colegada” de músicos indies de Valladolid a despotricar.

    Por cierto El Meister, yo te vi actuar en el concierto de The Midnight Travellers en Porta Caeli y me gustó, pero estoy seguro de que a otros no, y no por ello creo que merezcan más o menos respeto por sus opiniones o que sean menos “serias” XD

    saludetes

  3. Hola Troquel. Por supuesto, cada uno es libre de opinar lo que quiera y lo puede expresar como mejor le parezca. Ahora bien, creo que no es lo mismo decir que algo “te da vergüenza ajena” entre amigos y tomando un chisme que publicarlo en un webzine que, se supone, fomenta la cultura de nuestra comunidad. Por mi parte, ahi ha quedado mi opinión (en ningún momento se ha “despotricado”, que yo sepa). Me alegro de que te gustase mi música. A ver si nos vemos en el próximo concierto. Un saludo!

  4. Hola.
    No es la intención ofender a nadie con éste comentario en el que tampoco se les trata tan mal, pues indico que se defendieron dignamente a pesar de la sala y que tienen una base de seguidores que corean y bailan a gusto, eso no es sinónimo de nada malo.

    Si se ha criticado siempre se intenta hacer desde el respeto y dando razones para no caer en la critica por la critica. Puede que el termino ‘vergüenza ajena’ suene algo fuerte pero justo antes comento que no es el objetivo del grupo dar una lección de prosa, por lo que queda diluido, o al menos debería.
    Quizás tendría que haber comentado que las más o menos 25 repeticiones por canción de estribillos como “pon ese culo gordo a bailar”, “ven conmigo a bailar”, etc. eran tan cargantes como una de aquellas canciones de verano de King África pero no me parece adecuado.

    No viene a cuento y te aseguro que no es hacer la pelota, pero yo también te he visto actuar en solitario y la verdad que lo pasé genial, una gran interpretación apasionada y buena música la tuya.

  5. vamos a ver señores. a ver si ahora vamos a tener que moderar esto como si de un foro de quinceañeros se tratase. Sabemos lo polémico que es que cuando presentas en público algo de tu creación (disco, concierto, corto, película, exposición, teatro) vaya un crítico y haga una reseña (subjetiva) expresando su opinión… más aún cuando esa opinión, como es el caso, no es del todo favorable (aunque si la leéis de nuevo, veréis que no se os pone “tan mal”). Pero no por ello este texto deja de ser menos crónica/reseña/análisis de lo que fue aquella noche.
    Lo que no me gustaría es que porque una persona haya expresado su opinión de manera constructiva y totalmente educada se convirtiese esto en una guerra sin sentido, como dijo ‘troquel’, de los músicos de valladolid vs. los cronistas de este webzine (que son los malos por no poner de 10 para arriba a todo lo que se mueva por la ciudad)
    Las críticas siempre van a estar ahí. Es cuestión de cada uno aceptarlas o no, pero no nos rebajemos al nivel de troll de la red para encima no aportar nada nuevo como el nuevo comentario de X.

    PD: es curioso, cuando se hace una crítica positiva, nadie se molesta en comentar, pero en el momento en que la crítica es negativa siempre acaba entrando todo el mundo a desprestigiar estos textos.

  6. 1. Estaría bien -qué digo bien, sería sensacional- que una crítica no se centrase casi exclusivamente en datos accesorios como el mal sonido o el sempiterno retraso. Quizás sea que el ojo inexperto del resto de la crítica y la audiencia no sea capaz de darse cuenta de detalles tan esenciales a la hora de presenciar un concierto (irónicamente hablando).

    2. El dato anterior sería extensible a los comentarios que hacen los cantantes y/o artistas, a todas luces irrelevantes, salvo flagrantes excepciones.

    3. Los puntos anteriores serían extensibles a la reacción del público: a nadie le interesa lo más mínimo si bailemos, si cantemos o si lo pasemos sensacional. Peor aún si reptimos este dato hasta cuatro veces. Por no hablar del detalle irrisorio de si gran parte de la audiencia eran amigos de tal o cual banda telonera.

    4. Sería conveniente centrarse en los aspectos musicovocales de los artistas. A poder ser intentando razonar, sutilmente, las opiniones. No vale afirmar que el bajista tocaba de pena o que las letras daban vergüenza ajena, por ejemplo.

    5. Evitar expresiones de aficionado como “a pachas”, “berrear” o “el ritmo que le metieron quedó muy majo” que suena un tanto cutre. El diccionario de la RAE ofrece al periodista aficionado posibilidades insospechadas, ánimo.

    6. Del punto número 1: en caso de actuaciones de varios artistas intentar obviar de nuevo el retraso. Éste tiende a acumularse y vuelve a ser un dato innecesario, si bien de una comicidad inigualable.

    7. No obviar detalles que pueden pasar desapercibidos para el público incauto: está muy bien señalar, por ejemplo, que el artista en cuestíon rompió una tecla de su organillo casi al final del concierto (sic). Muy bien señalado, irónicamente hablando.

    8. Evitar expresiones farragosas del calibre de “casi casposo tan especial” o “no tuvo también pocos problemas”. El castellano le proporciona al periodista aficionado no pocos sinónimos que pueden aparecer en diversos puntos de la pieza periodística.

    9. Evitar datos pedantes. Es absurdo obviar un tanto los datos esenciales de la actuación de un grupo pero recordar detalles, un tanto geeks, como el modelo de teclado que llevó tal o cual músico.

    10. La crónica de conciertos no incluye declaraciones. Pero si el periodista aficionado tiene a bien incluirlas, preferiblemente que estén bien introducidas y que la frase resultante tenga sentido.

    11. Y por último, last but not least, nunca, bajo ningún concepto, terminar una crónica dirigiéndose al artista criticado. Además de ser un recurso recurrente y previsible hasta el aburrimiento, qué leches, no tiene sentido, ¿pretendéis que os conteste?

    De todas formas os animo a que sigáis escribiendo, que de todo se aprende, y más si contáis con el apoyo de un periódico. Así que seguid dándole al teclado hasta que no quede ni una sola tecla.

  7. Antes de nada, aquí nadie cuenta con el apoyo de ningún periódico, señor prittwitz.

    Por lo que veo, ud. es un gran entendido y erudito del periodismo musical, así que le invito a que cada vez que desde este humilde webzine aficionado (que no periódico) se haga una crítica con tan malas formas periodísticas como las que menciona, se tome la molestia de hacernos una contracrítica dejando en evidencia nuestra ignorancia e inexperiencia ya que, si tiene tanto tiempo libre como para hacer un comentario compuesto por 11 puntos que no va a ninguna parte, seguro que puede invertirlo en algo mucho más productivo como lo expuesto.

  8. Hola a todo el mundo. Antes de nada me presento, me llamo Roi y soy el organizador del concierto.

    Que quede claro que ante todo, esto lo digo desde la atención que se merece una propuesta que tiene a bien acercar y mostrarnos las diferentes opciones culturales de la ciudad y que aunque personalmente no me aporta nada, sobre todo cuando son opiniones, se merece todo mi respeto.

    La primera parte de vuestra reseña me parece una ingente falta de respeto hacia un grupo a través de una crítica fácil, sin argumentos y con la que conseguís una polémica probablemente buscada. Os ha podido ser beneficiosa en el término de mayor afluencia en la web pero creo que os ha puesto en el lugar que os corresponde como críticos musicales (aficionados o no) dejando claro que cada uno ya no escribe como quiere, sino como puede. Con críticas como esta ponéis en tela de juicio todo lo que hacéis.

    Las referencias que dais a la hora de asemejar el sonido de Diploide me parecen ridículas así como el grado de “grandes” a un grupo como Avalanches. De lo de Junior Senior mejor no hablamos. Sobre el tema de las letras está claro que las formas utilizadas no son dignas de García Márquez pero parecéis olvidar que esto es pop festivo hecho para el disfrute, el gozo y el baile, con temáticas paródicas y sarcásticas que nos trasladan a multitud de referencias que si no se conocen es difícil advertir. Si queréis metafísica ahí tenéis a Vegas y Chinarro.

    Sobre Crepúsculo, poca cosa, es una copia de lo que escribió Paula G. Duque en el Norte pero mucho peor escrito. Venís a decir lo mismo, sin aportar nada.

    Ah, es cierto que Diploide no tuvieron su mejor noche, es eso te doy parte de razón, pero estás equivocado respecto a los motivos por lo que se retraso el concierto. El problema no fue con la sala, sino con el software del ordenador. Creo que deberíais explicar tanto vosotros como otros zines de la ciudad el problema que tenéis con el Café Teatro ya que casi siempre intentáis desprestigiarles con el sonido, el calor, lo feo que es Carreño o lo que se os ocurra.

    Un saludo

  9. ¿Una copia de la reseña de Paula G. Duque? Nada más lejos de la realidad: http://www.nortecastilla.es/ocio/risa-entera-200902281808.html

    Antes de FINALIZAR de una vez la polémica que esta breve reseña ha creado y que, como siempre, no va a ningún lado, os comentamos a todos que en ningún momento nuestro objetivo era buscar la polémica ni obtener una mayor afluencia en notedetengas. Hemos repetido, repetimos, y repetiremos que esto NO es una crítica musical profesional ni nada por el estilo, sino una crónica SUBJETIVA y PERSONAL de la persona que asistió al concierto y que, apelando a su derecho de libertad de expresión, plasmó su opinión en este webzine que tanto visitáis últimamente debido al texto.

    Una pequeña reflexión antes de cerrar la puerta: si tanto os quejáis de que “tanto nosotros como otros zines de la ciudad criticamos al Café Teatro con el sonido, el calor,…” ¡será por algo! digo yo… Busca las crónicas de café España, a ver si se dice algo sobre eso… A Asklepios y Mambo tambiém se le mete mucha caña y no viene nadia a llorarnos a los comentarios.

    Saludos y buen finde a todos los lectores 🙂

    PD: a ver cuándo empezamos a aceptar las críticas

  10. Los que habéis escrito esta crítica no tenéis ni idea. Os jode que los diploide no sean unos indies de mierda como los que os gustan, que suenan todos iguales y cantan en inglés. A mi me molaron las letras a lo reggeton porque además las nenas se ponen como locas. ¡¡¡¡¡seguid así diploide!!!!!! ¡ni caso a los modernos!

  11. Sé que ya llego tarde a esta crónica pero claro cuando hablan mal de uno acaba llegando a sus oídos. Nunca, y creo que todos los que me conocen lo saben, entro al trapo de este tipo de chismes pero claro mi nombre se cita y por lo tanto tengo que hablar.

    Cuando hace ya nueve años el Café Teatro se propuso hacer conciertos vio en ello una forma de aportar algo a nuestra modesta ciudad, siempre fue una propuesta sin demasiadas pretensiones, formatos acústicos en un recinto pequeño. Poco a poco todas las salas de Valladolid han ido abandonando sus propuestas musicales, los grupos locales se han quedado sin sitios donde actuar y traer un grupo de fuera siempre es un riesgo y un negocio totalmente deficitario. A pesar de todo esto no tiramos la toalla y seguimos arriesgando, damos un lugar a esos pequeños grupos y solistas, les damos la posibilidad de arriesgar con nosotros a las bandas de fuera y a los colectivos culturales que aun creen en Valladolid como una ciudad cultural, siempre estamos abiertos a nuevas propuestas y siempre estamos dispuestos a poner la otra mejilla.

    Siento que os molesten los retrasos de conciertos, el calor o cualquier problema técnico que pueda haber. Me imagino que en otras salas de Valladolid con programación semanal durante casi todo el año esto no pasa… Lo malo de nuestra ciudad y su gente es que esta predispuesta al amarillismo, he programado más de 300 conciertos en el Café y estoy muy orgulloso de ello aunque solo veo crónicas cuando el concierto es “guay” o está dentro de esta pseudo escena intelectualoide vallisoletana. ¿Qué pasa? ¿Los grupos locales o los de fuera que no tienen tanta promoción no son importantes? Para mí sí lo son y por eso trato igual a Joe Crepúsculo o Maga, por poner un ejemplo, que a cualquier otro grupo local, aunque vosotros no hagáis lo mismo.

    Cada uno tiene su trabajo, entiendo y me parece bien que haya críticas negativas de cualquier cosa incluso a veces hasta aprendo pero esta hacha de guerra que habéis levantado contra nosotros no tiene ningún sentido. A veces dan ganas de dejar de hacer cosas, mandarlo todo a la mierda y que se encargue otro ¿Acaso es lo que queréis? Mirar si tan poco os gusta las propuestas que planteamos por favor no volváis, a mi me da igual y si alguno quiere hablar conmigo o tiene algún problema que dé la cara, es fácil encontrarme y estoy dispuesto no solo hablar si no también escuchar.

    Me gustaría que todo esto no transcendiera y fuera más allá porque todos los que trabajamos en el Café Teatro lo hacemos pensando que formamos parte de algo bonito no solo para nosotros si no para todos los que acuden ya haya concierto o no.

    Un cordial saludo

    Jose Carreño

  12. Pues si que esta dando de sí esta entrada, aunque la verdad es que no se gana en visitas -como alguno apuntaba- solamente las vuestras.
    Decir que la polémica no era buscada y tampoco era tal la intención de la cronica, aunque ya se sabe que todo lo que sea hablar de alguien bajando del ‘estuvo muy bien’ ya es objeto de polémica y detonante para tirar piedras contra el redactor, pero es un tema que tenemos asumido.
    Al académico amigo de los 11 puntos, poseedor de la verdad última y absoluta sobre la realización de crónicas comentarle que me pareció gracioso su comentario pero no aporta nada compartiendo su gran decálogo orientativo que debemos creer a pies juntillas porque… porque tiene 11 puntos.
    En próximas ocasiones, para tenerle contento, se evitará comentar si el sonido es malo -que lo mismo es algo importante para darte cuenta de como va el concierto-, así como incluir expresiones cercanas para hacer el texto más ligero, la reacción de la gente, incidentes que les ocurran a los interpretes y afecten a su forma de tocar, etc, etc,…
    Sobretodo en conciertos como éste en el que la música no es un factor muy importante, Crepúsculo basa su propuesta en el sentido del humor y pasárselo bien -dice- más que en el virtuosismo y diploide parece que tanto de lo mismo.

    Como ya he dicho no se busca faltar el respeto a nadie, aunque si nos ponemos así de demagogos sí parece esa la intención de algún comentarista que no tolera criticas negativas, y mira que no lo es tanto. Muy agudo el que comenta que es una copia de la crónica de Paula G. Duque (un saludo!) basándose en que se está hablando de lo mismo,… malo sería que fueran totalmente distintas después de ver el mismo espectaculo!

    A Carreño decirle que me parece genial la actividad que esta haciendo trayendo a grupos y dando la oportunidad a otros locales para que tengan una oportunidad de actuar, pero si un concierto tiene problemas y no se oye del todo bien pues no veo porque no se va a poder decir, pero es un comentario puntual que no implica ni mucho menos ‘levantar el hacha de guerra’; de hecho si alguno relee la entrada verá que la parte de Joe Crepusculo es muy favorable, no te dejes llevar por otros comentarios.
    Vale que para ti es un negocio y tienes que defenderlo, lo comprendo, pero tampoco es para entenderlo como un ataque porque ademas no se culpa a Café Teatro por el sonido ni los problemas de retrasos derivados, y por supuesto no se puede extrapolar a todos los demás porque cada concierto es un mundo, suena distinto y se monta de forma diferente.

    Para finalizar decir que por mucho que nos intenten difamar, ésto no va a significar que en adelante, cuando un espectaculo no nos guste, nos callemos.

  13. La verdad es que estoy alucinando con la repercusión de 3 frases sobre una crónica que CUANDO LA LEES entera no es negativa. Me parece que alguno se ha olvidado de leer:
    …defendiéndose dignamente…
    …la sala estaba llena de fans y amigos…
    …Deleitándonos…
    …y ademas nos estaba encantando…
    Pero si quereis seguir indignados, desprestigiándonos y haciendo una bola de todo esto, pues adelante pero sigo sin entender que la gente se ofusque si a nuestro redactor no le gustaron las letras y se le ocurre poner que hubo problemas tecnicos…
    A lo mejor la próxima vez os lamentais porque nadie dice nada de nada. Que eso es lo triste.
    A mi sí que me dan ganas de callar, o quien sabe, de meter toda la caña que alguno se merece.

  14. Al tenor de todas estas conversaciones acaloradas, el otro día me decidí ir a ver a Diploide a Salamanca para formarme una opinión aprovechando el Festival de las Artes. Y la verdad, después de asistir a este concierto, es que ninguna de las opiniones aquí vertidas refleja la realidad.

    La realidad es que si se pone una piedra en vez del cantante, estoy seguro de que el grupo sonaría mejor. El cantante intentaba ser guay, pero no, lo que conseguia era el efecto contrario, ser una persona ridícula y de la que sientes pena por creerse artista.

    He de reseñar también, que las únicas personas que parecían disfrutar y bailar sus canciones de verdad, eran sus amigos. El resto de la gente era una mezcla de personas anodadas y que no sabían como aguantar la risa. Yo por mi parte, aguante 5 canciones y partí.

    Como comentario positivo, es que el Dj puede salvarse si se separa a tiempo del cantante, porque me gustaron mucho sus bases. Suerte señor DJ.

  15. Deirdre, por alusiones, yo disfrute porque soy su amigo y me gusta lo que hace. Puedo asegurar que hubo gente anonadada, oi cosas como: que tipo de musica dirias que es esto? (lo cual no podria juzgarlo como positivo o negativo, ciertamente).
    Tambien vi gente irse.
    Tambien vi gente entrar y quedarse.
    Tambien vi gente disfrutar y sonreir (no reirse).
    Vi mucha gente que iba al local sin saber que habia concierto y se iba, normal.
    Tambien vi ‘erasmus’ borrachos que dificilmente entenderian nada, algunos tambien se fueron.

    Respecto al tema del cantante, poco puedo decir, puesto que mi version sera sesgada, pero dado que no estuviste todo el tiempo decirte que te perdiste una de las presentaciones de una cancion mas hilarantes, acidas y sublimes que yo recuerde en mucho tiempo.
    Tambien es verdad que la ironia no es un plato de agrado y entendimiento de todo el mundo.

    Por otra parte, él, hace mucho tiempo que es un artista, de la palabra, fundamentalmente, como pocos que yo conozca.

  16. DIPLOIDE en tu cara, ¡Diploide!.

    ¡Diploide MotherFuckerrrrssss!

    A la izquierda, izquierda, izquierda, a la derecha, derecha, derecha.

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