El Domingo suele ser un día inusual para disfrutar de un concierto, aunque en vista de las pocas salas que dedican espacio estos días a la música en directo y las aun menos que lo hacen coincidiendo con el fin de semana -mucho mejor, claro, poner dudosa música enlatada- deberíamos ir acostumbrándonos a este día, como lo hicimos a salir los jueves o pasar por el banco a discutir de las comisiones los sábados.
Los Jackets presentaban su primer disco y se despedían al tiempo de la actividad musical por un año, asique lo hicieron en el mejor marco posible: en la sala mambo, como teloneros de los Wave Pictures y registrando una entrada generosa, que bien podía venir sólo por el grupo de cabeza, pero que disfrutó y siguió el juego a los de Valladolid.
El conjunto lo componen batería, dos guitarras, bajo y voz y media (básicamente porque en todo el concierto no acertamos a oir a esta segunda cantante, casi ni en las pocas composiciones en las que jugaba el papel de voz principal) y comenzaron de una manera bastante contundente con ‘Half Opened Door’, que a pesar de nervios iniciales sonó muy rockera dentro de su estilo, gracias en parte a algun riff en la guitarra de aire sesentero.
El concierto fue avanzando mientras la banda interpretaba canciones de su maqueta -celebradas por el publico- junto con las nuevas de éste “The First Day…” en el que vemos su querencia por las melodias marcadas junto con la suave voz de eva, en la que agradecemos que sea directa, limpia de ‘gorgoritos’ e incluso un poco rotunda cuando es necesario. Entre lo más destacable podemos contar el arrebato funky de ‘Make You Happy’, estos momentos en los que la guitarra suena de refilón como en los 50 y las voces -consciente o inconscientemente- se acercan más a una balada de la época y sobretodo cuando recuerdan a los cranberries por esa forma de enfocar los estribillos con guitarras más pesadas y un ritmo más marcado y contundente con la batería. Buen concierto de una banda que aunque necesita rodaje parece que no va por mal camino.
Después salieron los esperados wave pictures en su ya tercera visita por estas tierras en las que tanto triunfan, cosa que no es de extrañar si mantienen ese directo tan energético, alegre y potente que gastan. Como ya repetian, los de David Tattersall nos presentaron un set algo distinto del habitual, por eso de no repetirse, entre el que nos presentaron algunas nuevas canciones -incluida una que nunca antes habían tocado en directo, compuesta por el rubio solista en honor a una de sus series de televisión preferidas, Charlie’s Angels, cuando aún era un solitario adolescente que no salía mucho de su casa- sin olvidar los temazos del Instant Coffee Baby. Siempre alegres y simpáticos, su parlanchin lider no dejó de hablar entre canciones mostrandose una de estas personas capaces de contagiarte su alegría y causar una impresion positiva desde el primer momento a pesar de su apariencia corriente; justo como su música y sus conciertos: no podemos hablar de maestria, pero si de una soltura sorprendentemente envidiable a la hora de fusilar las canciones como grupo -justo el talento que no te esperabas en ellos- y particularmente de improvisar a la guitarra esos solos tan apasionados y deudores del Neil Young de ‘Southern Man’ y otras de la época, mezclando rock con folk y melodia con un gusto muy acertado.
Poco podemos añadir del concierto para enfatizar lo bien que lo hicieron más que remarcar lo estupendamente enérgicos que sonaron esperados hits como ‘Leave the scene behind’, ‘I love you like a madman’ y ‘Strange fruit for David’, o recordar cómo además de hacérnoslo pasar bien a nosotros se lo pasaron bien ellos sobre las tablas tocando la guitarra sobre su cabeza, sacando al batería de los Jackets para interpretar un tema con ellos o tocando suavemente para no entorpecer su voz sin microfonos cuando en un par de temas se colocaron en la parte del escenario más cercana al publico creando un silencio cerrado en la sala totalmente merecido.
