Lázaro son Nieves Lárazo, Juanma Padilla, Rafael Revelles e Iris Banegas. Y tienen un plan marciano que enseñarán al Planeta Tierra mañana. El sábado, 21 de octubre, repetirán el mensaje en la sala Siroco, en Madrid. Hablamos con ellos para que nos adelanten algo y nos dan la condición para invitarnos a todos sus conciertos.
“Es reguetón pero también es ‘torn’, en inglés ‘torn’ significa rasgado, destruido…”, decís de vuestro nuevo proyecto, “RGTRN”. Aseguráis también que habéis destrozado ese estilo para llevároslo a vuestro terreno y vestirlo con vuestra propia niebla. ¿Cuánto de reguetón tiene “RGTRN”?
Nieves: Tiene más de destrucción que de reguetón, me temo. Nos hemos limitado a robarles el ritmo, que me parece un buen ritmo que no tiene la culpa de nada. Ha sido bastante divertido coger ese ritmo, hacerlo nuestro y quitarle toda la grasa y el machismo que a veces conlleva este género maldito.
Vuestro anterior disco, “Soles y Pingüinos”, incluye el tema ‘Vía Láctea’, en la fotografía de promoción del nuevo aparecéis como astronautas y en redes ya habéis avisado de que Lázaro tiene un plan marciano. ¿De dónde viene ese interés por el espacio?
Nieves: Sí, es tremendamente curioso. ¡El espacio nos persigue! Lo cierto es que muchas veces viene él solito, sin que lo llamemos. Con ‘Vía Lactea’ tenía más que ver con una aceptación del lugar propio en el espacio. Ahora con “RGTRN” es más como una exploración de planetas musicales, de ahí el plan marciano. Todo surgió porque nos pareció un plan bastante marciano, el meternos en el local para explorar el reguetón, que es realmente como si fuera otro planeta musical para nosotros. Aunque luego de ahí salieran unas letras que las considero más cercanas a mí que otras cosas que he escrito anteriormente.
Vuestra bajista, Iris Banegas, es también fotógrafa, ¿llegan a tocarse ambas facetas?
Iris: Inevitablemente sí. Ambas facetas las tengo muy interiorizadas. La música recrea imágenes. Me encanta la combinación. Y el proceso de juntar en un bote imaginario a los músicos con su música, mezclarlo bien todo en mi cabeza y retratar el resultado me estimula mucho. Con Lázaro he tenido la oportunidad de meterme dentro del bote con ellos y agitarlo desde dentro para autoretratarnos.
‘Alaska’ es el adelanto que habéis dejado ver de esta nueva etapa. ¿Por qué dar un nombre tan frío a un corte tan luminoso?
Nieves: Sí, me encanta ese contraste. El nombre inicialmente surgió porque alguien dijo que le recordaba a la cortinilla de “Doctor en Alaska”. Y luego, al ir dándole forma al concepto de la letra, me gustaba mucho la lejanía que invocaba Alaska, me gustaba sentir que escribía esa canción desde un sitio muy lejano… buscando una señal.
¿Qué relación guarda el tema con la insinuante imagen que habéis elegido para ilustrarlo? ¿Forma parte de un concepto mayor?
Nieves: A Iris le inspiró ‘Alaska’ para hacer este dibujo, y la verdad es que a mí cada día me fascina más. Me encanta que ella haya visto todo ese mundo femenino en esa canción y el modo en el que ella lo ha plasmado.
Iris: No se trata de insinuar. Para mí la relación que guarda es que es una flor y es amor. Me parece bonito que cada uno podamos interpretarlo a nuestra manera.
“RGTRN” lo ha producido Víctor Cabezuelo, ¿cómo ha sido trabajar con él?
Nieves: Ha sido una experiencia muy enriquecedora, creo que para todos, pero, y con perdón, ¡sobretodo para mí! A mí personalmente me ha inspirado mucho trabajar con él. De alguna manera me ha obligado a no contentarme con una versión primera de las canciones, sino a estrujar realmente mi espíritu creativo todo lo que daba, y a dejarlo fluir libre, sin prejuicios y sin contentarme con lo complaciente. Al principio reconozco que me costó, pero ahora le estoy tremendamente agradecida, y el resultado yo creo que habla por sí solo. También creo que ha hecho un trabajo muy bonito de equipo con nosotros, respetando cada aportación y añadiendo él también una vestimenta de sonidos que creo que les ha sentado genial a los temas.
Manuel Cabezalí forma parte de la vida de Lázaro casi desde el principio, cuando era un proyecto personal y por definir de Nieves. Produjo también “Soles y Pingüinos” y se ha encargado de mezclar este último trabajo. ¿Cuál es su papel en todo esto? ¿Cuál pensáis que es su mayor aporte?
Nieves: Manuel es una pieza clave en Lázaro. Tenemos la grandísima suerte de que nos tiene mucho cariño como banda, y nos apoya y acompaña en cada decisión que tomamos. Desde el principio él me retó a terminar el primer disco, “Fierce”, y, como dices, lo produjo, dándole forma y vida a las canciones desde el primer momento. En “Soles y Pingüinos” su aportación también fue de grandísimo valor, y en el disco que verá la luz el año que viene tendrá también un papel en la producción junto con Víctor. Se podría decir que es un poco el gurú de la banda, es como una especie de hermano mayor que te guía, te apoya y te anima a levantarte cuando te caes.
Ya habéis explicado alguna vez que para tocar vuestras canciones usáis objetos como sartenes. ¿También lo habéis hecho para las de “RGTRN”? ¿Habéis introducido algún elemento nuevo?
Nieves: En “RGTRN” hay bastante bandeja de horno, y hay también sartencitas y cacitos, cajas de galletas y toda la mandanga, sí. Eso es obligatorio ya, en todo lo que haga Lázaro. ¡No sin nuestras sartenes! Me encantaría tener un quinto miembro que se dedicase a tocar sartenes en los conciertos, pero aún no ha llegado ese día. También en esta ocasión hay alguna base electrónica, que aún no habíamos utilizado.
Habéis grabado el álbum en el Observatorio Musical, ¿cómo fue el proceso?
Nieves: Grabamos una parte allí en el estudio de Rosillo, con Jacobo Naya, y otra parte en nuestras casas, la de Víctor y la mía. Estuvimos muy a gusto todo el tiempo, y además el estudio de Rosillo tiene una sala de grabación muy bonita en la que da mucho gusto grabar.
Presentáis el disco mañana, un día antes del concierto que daréis en la sala Siroco. ¿Es un reto para ver a quién le da tiempo a aprenderse las canciones?
Nieves: (Risas) ¡Sí! ¡Lo es! De hecho, si alguien se aprende una canción que tiene como título ‘Rhinos’, le invitamos a todos nuestros futuros conciertos. En serio. Me costó aprendérmela hasta a mí… Tenemos en general ideas marcianas, como esta, y nos gusta dar la vuelta a las cosas y experimentar y cambiar las cosas de sitio a ver qué pasa.
¿Cómo afrontáis o qué esperáis de ese concierto?
Nieves: Para nosotros ese concierto es muy especial, no solo por presentar los temas nuevos, sino también por volver a tocar con nuestros amigos de Sex Sodio Sullivan en Madrid y en Tenerife. Esto es algo que hicimos hace dos años y fue un absoluto placer, con lo que ahora estamos muy emocionados con la idea. En este concierto de alguna manera estamos buscando unificar toda nuestra diversidad en un solo camino que tiene sentido, y creo que lo estamos consiguiendo. Confluyen canciones de nuestros tres trabajos, que, a pesar de ser tan diferentes entre sí, también conviven con paz y armonía.
Para acabar, ¿qué artista estáis escuchando más últimamente? ¿Alguna recomendación?
Iris: Yo estoy muy enganchada a lo último de Gorillaz y a The Lemon Twigs.
Juanma: Yo estoy escuchando mucho los últimos trabajos de Pumuky, Ricardo Lezón, Mogwai y Los Coronas. Aprovechando los temas que va a sacar con Tórtel, recomiendo encarecidamente a Alberto Montero, alguien a quien se le debería prestar muchísima más atención. Y aprovechando la oportunidad que me dais y enlazando con Alberto Montero, recomiendo a Rubén Artabe y solicito a alguien que mande una gira conjunta con Alberto Montero.
Rafa: Yo estoy disfrutando lo último de Grizzly Bear y el de The National.
Nieves: Yo he descubierto a Trentemoller, y también ando escuchando bastante el nuevo disco de The Horrors, que me parece bestial. En el ámbito nacional me gusta mucho lo nuevo de La Bien Querida, a la que además tendré el placer de acompañar en su próxima gira, Helena Goch y Penny Necklace. Todo chicas, ¡fíjate!
