Hemos atravesado el ecuador del año 2015 (las temperaturas así lo demuestran) y en Notedetengas hemos decidido hacer un balance musical de lo que va de año, es decir, elegir cuales han sido los mejores discos de 2015 (por el momento). Así, hemos puesto nuestras neuronas a trabajar para valorar qué trabajos de los estrenados en estos primeros meses del año, nos han gustado más. Estos son los resultados.
Sufjan Stevens / Carrie and Lowell
Que durante las últimas décadas hayamos cambiado nuestra forma de escuchar música ya no es ninguna novedad. Pero Carrie & Lowell nos llama a tirarnos en el sofá, darle al play y leer, como antaño, las letras de todas y cada una de las canciones. Silencios, susurros y unas guitarras acústicas delicadas nos trasladan justo al lado del de Detroit, escuchando, y de qué manera, una historia que todos conoceremos tarde o temprano. El séptimo disco de Sufjan Stevens tiene lo mejor de la música triste y de las canciones alegres, 11 canciones que resultan un combo melancólico no apto para domingos lacrimógenos. No había otra opción: Stevens repasa en este homenaje a su madre el miedo a la muerte y a la pérdida pero también el amor familiar y los recuerdos de la infancia. Suena a Kings of Convenience y a Simon & Garfunkel (qué sorpresa nos llevamos con ‘Should Have Known Better’), a diario adolescente y a cartas que nunca se enviaron; suena sincero, desnudo y sin artificios. Un disco que teniendo poco no necesita nada más y que casi por unanimidad, se ha convertido en uno de los mejores discos de 2015 para la redacción de Notedetengas.
Jaime XX / In colours
El regreso de Jaime XX realmente no lo es. In Colours es su primer disco original y propio. Hace ya cuatro años que sacó la cabeza del fondo de escenario de The XX con We’re New Here, sublime revisión del por entonces reciente disco de Gil Scott-Heron. Independientemente de ello es el buen gusto para el beat, el talento rítmico y la finura melódica que derrocha Jamie, y que en este nuevo trabajo queda sobradamente demostrada, integrando en apenas 45 minutos perlas sofisticadas como “Sleep Sound” y “Girl” -ya publicadas como single-, abrasivas como “Gosh” y festivas, de las capaces de alegrar el día, como “Loud Places”. Esta última pertenece a las contadas colaboraciones escogidas por Jamie, que encajan como un guante en el caso de sus compañeros Oliver y Romy de The XX, y que suponen la única mancha del disco en el caso de Young Thug y Popcaan. El resto de minutos forman un disco soberbio. Que vengan muchos más.
Father John Misty / I love you, Honeybear
Con su segundo trabajo, J.Tillman saca de nuevo sus barbas a pasear a la palestra, siendo este nuevo disco algo más lineal que su debut (como ya os comentabamos el pasado mes de Febrero), pero que deja cortes de suficiente calidad y enganche como ‘True Affection’ , ‘Bored in the U.S.A’ o ‘Strange Encounter’ , aún así es para nosotros uno de los mejores discos del 2015, será que somos unos sentimentales, o que el señor Tillman sabe un poco de cómo hacer las cosas bonitas.
La bien querida / Premeditación, nocturnidad, alevosía
Si, también se nos ha colado un trabajo nacional entre los mejores discos de 2015. En su nuevo trabajo (que nos ha ido entregando a cuentagotas) La Bien Querida se sumerge aún más en ritmos electrónicos sutiles para seguir palpando las capas del corazón a golpe de letras sinceras que sin ser una amalgama de metáforas y estrofas enrevesadas consiguen llegar al oyente y al enamorado/ desenamorado hasta las entrañas. Es innegable que la puesta en escena de éste último trabajo ayuda a Ana y su banda a realizar un pacto con el diablo y dotar de una juventud perpetúa a sus clásicos y a dejar sus nuevas composiciones como una nueva colección de cánticos atemporales.
Lo-Fi-Fnk / Nightclub Nirvana
Pero, ¿por qué nadie está hablando de lo nuevo de Lo-Fi-Fnk ? Su tercer trabajo, ‘Nightclub Nirvana’, es EL disco del verano. En efecto, los suecos siguen obsesionados con esta estación del año, y su último álbum es una deslumbrante sucesión de trallazos de synth-pop canicular, empezando por la pista titular del álbum y siguiendo con esa locura hedonista que es ‘Pirate Radio’, dos grandísimos temas que no seremos capaces de dejar de escuchar en los próximos meses. Las estupendas ‘Lion’s Pride’, ‘Sensual Melodie’ y ‘Will U B There?’ confirman la querencia epicúrea del antes-dúo-ahora-trío, brillando especialmente en ‘Escapade’, una joya que suena tal como te imaginarías que lo hace una canción con ese nombre. Lo-Fi-Fnk por fin han logrado firmar ese exultante disco estival que llevan persiguiendo probablemente desde el inicio de su carrera. Lástima que, como dirían los Smiths, “the world won’t listen“.
Youmi Zouma / EP II
Los neozelandeses Yumi Zouma, sorprendieron en su primer trabajo por devolvernos de forma inmediata a los ochentas más elegantes a través del sintetizador. Ahora regresan con este EP II, para reafirmar la gran apuesta que son, y acercarnos un poco más al presente, pero usando sus mismas armas con las que nos cautivaron, la susurrada voz femenina mezclada con unos pulcros teclados que transmiten sensibles melodías llenas de sentimentalismo. Temas como este les han hecho colarse entre uno de los mejores discos del 2015.
Champs / Vamala
Los hermanos Michael and David Champion han confeccionado uno de los mejores discos del año 2015.La sencillez instrumental de los doce temas que forman parte de Vamala, las armonías vocales que rozan la perfección en temas como “Sophia” o “Down (alone on the avenue)” y la belleza extremecedora de “3,000 miles” hacen de este un disco preciosista y único, imposible de ignorar. Los de la Isla de Wight (al sur del Reino Unido) tienen un cierto aroma a Simon and Garfunkel, no solo porque sean un dúo, no solo porque modulen sus voces hasta hacernos conmover, no solo por las guitarras acústicas que se aprecian en sus canciones,sino porque algunos de sus temas se sitúan muy próximos a los del dúo americano como “Forever be upstanding at the door”, “Send me down”o “Roll me out”.
Waterboys / Modern blues
Ya prácticamente todo el mundo se había olvidado de esta gran banda rock-folk de los ochenta noventa, cuando de repente su líder Mike Scott nos ha sorprendido ideando este discazo de rock clásico nacido en Nashville y en el que da una lección de instrumentación – especial es la exhibición del órgano Hammond – melodías épicas, entrega vocal y actitud rock en cada una de sus canciones. Mención especial a la final “Long Strange Golden Road”, con sus diez minutos que pasan sin que te des cuenta. Un monumento que conservaremos como un clásico de nuestros tiempos.
