25 abril 2024

wyomingppal

Rodeados de unos asistentes con una media de edad un poco más elevada de la que suele acudir a conciertos de rock en Valladolid, acudimos a la inauguración de la sala Kerala (ex-Rosaleda) como sala de conciertos, y ¿qué mejor forma de empezar que con un poco del mejor rock & roll de la mano de una de las caras más populares de nuestro país?

El gran Wyoming (defendiéndose a la guitarra y voz con inglés macarrónico) se acompaña de tres grandes músicos que por su cuenta forman el grupo La última experiencia para hacer versiones de los mejores y más variados temas. Juntos disfrutan de su música y hacen disfrutar desde el primer momento al público. La salida al escenario del presentador del El Intermedio fue acogida con calidez por parte del respetable que le propinó varios piropos a los que él respondió con ingeniosos comentarios aprovechando para introducir el show.

A lo largo de toda la noche sonaron clásicos desde Walk on the wild side de Lou Reed, For What It’s Worth, These boots are made for walking de Nancy Sinatra, Louie Louie… Con Chuck Berry incluso se permitió resumir su historia para presentar No particular place to go como podéis ver a continuación:

httpvhd://www.youtube.com/watch?v=zfcopRF71Yk

Como el auténtico showman que es, Wyoming amenizaba los intermedios entre tema y tema con frases en inglés para crear el ambiente americano rocker, incluso en medio de una canción se permitió cantar una especie de chirigota andaluza.

Después del Rockstar de SmashMouth y la potentísima Are you gonna be my girl de Jet continuaron haciendonos saltar con un poco de mod en castellano de Los Salvajes y su Soy así, un poquito también de rock suburbial con Rosendo y el mítico Bailaré sobre tu tumba y Cuenca minera de Siniestro. Para los bises reservaron otros de los grandes clásicos: Like a rolling stone de Dylan y, como no, el Johnny B Good para acabar con una rockera versión del tema ochentero Video killed the radio star.

Divertidísimo concierto sin mayor pretensiones que las de divertir que entretuvo a todos con el mejor rock and roll y el mejor humor a un público entregado desde el primer momento a la banda, pidiendo “más jamón” y por supuesto más y más bises en un ambiente relajado y en un marco, el Kerala, que por su sonoridad, espacio y decoración bien puede convertirse en una de las nuevas esperanzas de Valladolid en cuanto a salas de conciertos.