28 marzo 2024

Jairo Zabala apareció sólo en el escenario, acompañado simplemente de su guitarra y se plantó en medio de la abultada cantidad de instrumentos de la banda con la que gira, por cierto con la que no muchas veces se le puede ver, y comenzó a interpretar ‘La Brisa‘ de manera acústica e íntima, pidiendo colaboracion del publico, para terminar incorporándose al cuadro el resto de músicos y redondear esa preciosa balada folk con trompeta latinas y base jazzie a cargo de las delicadas escobillas del batería y el contrabajo.
Este truco que podemos calificar sin duda de efectista, no hay que olvidar que Jairo lleva toda la vida en la música profesional sobre los escenarios y se las sabe todas, fue tan sincero y apañado que la gran cantidad de publico que -a pesar de la nevada- se acercó aquella noche a Porta Caeli se olvidó del frío, la nieve y otros menesteres hipnotizado por la gran figura de este magnifico músico que transmite tanta naturalidad y simpatia como lo hacen sus alegres composiciones. Cercano en todo momento centró el concierto en las canciones que componen su disco más nuevo “Nubes de Papel” tratando de transmitirnos la totalidad sonora del album gracias a una banda multiinstrumentista y destacable.
Continuó con alguno de sus canciones más destacables del primer disco “DePedro” (2008) como ‘Two parts in one’ seguido de una fantastica versión de ‘Llorona‘ de Chavela Vargas donde destacó la mandolina eléctrica, el contrabajo y una acertada batería que entusiasmó al publico que ya se había sumado en multitud a los coros.
La parte central del concierto aglutinó las canciones que más esperaba el publico fan y con las que más disfrutó el asistente casual, al que se gano inmediatamente, como la preciosa ‘Te sigo soñando’, ‘Nubes de papel’, ‘La memoria’, ‘Don´t leave now’, ‘Empty fields‘ o la destacable ‘Cuando el día se acaba‘ que destacó todos los elementos musicales que estabamos disfrutando: espíritu energizante y vitalista con unas melodías claras y luminosas, un teclado en su justa medida, las trompetas dando ese toque latino, el uso del vibráfono y la melódica para rematar las armonías y sobretodo las guitarras acusticas y electricas a ratos llevando la voz cantante… un conjunto perfectamente afinado que firmaba un concierto bien redondo.
El show se completó con canciones como la dedicada a Victor Jara, la version del ‘What goes on‘ de la Velvet, un posterior amago de fiesta electronica jugando con el sintetizador, que sinceramente tienen que ensayar un poquito más, cosa que no empaño para nada la gran celebración que se estaba produciendo, y ‘Diciembre‘ para el bis, repitiendo formato acustico con increible silencio por parte del asistente, que junto con la entrañable ‘Comanche‘ cerraban esta demostración de country-pop-americana-latino y fronterizo. Que nos dure por muchos años!