27 septiembre 2025
dcode2011_cronica

Con el intenso calor que sufrimos el viernes por ir corriendo a ver a Toundra decidimos evitar las temperaturas extremas de las 17 horas nuevamente y perder a Polock, no sería por ganas ya que lo hacen muy bien los chicos, sirvase de ejemplo la crónica de Polock en su parada por Valladolid. Para la proxima edición del Dcode, que por cierto se acaba de confirmar, una sugerencia: no nos importa que los conciertos terminen una o dos horas después como en el primavera, ya sería genial si se empalmara con la hora de apertura del metro, pero que no empiezen tan pronto, aguantar conciertos en un recinto practicamente sin sombras a las primeras horas de la tarde es un autentico suplicio.

A los que teniamos realmente ganas de ver es a la sensación pop cantado en catalán de la temporada: Manel, de los que pudimos ver medio concierto. Los cuatro de Gràcia defendieron sin cuerdas ni trompetas, ni falta que les hizo, las canciones de su último disco ’10 milles per veure una bona armadura’ y facturaron un concierto tan alegre y melodico como suenan en estudio. No faltaron ‘Boomerang’, ‘Benvolgut’ ni la curiosa versión del ‘Common People’ de Pulp, que incluyen habitualmente en sus conciertos, que hizo que el menos de medio aforo de valientes canturrease al ritmo de La Gent Normal.

Acto seguido en el escenario paralelo aparecieron los franceses Phoeni…. ah que no! (ya nos gustaría) se trataba de los también franceses Jamaica, muy hypeados y fabricantes natos de hits tirando del sonido de los ya comentados pero incluyendo unas guitarras muy ochenteras en el sentido del riff potente a lo vieja gloria tipo AC/DC, sin olvidarnos de la aceleración en ritmos rompecaderas que le añade la producción del Justice no bigotudo, Xavier de Rosnay. Esto que a primera vista pinta muy bien en directo no mantuvo el espiritu y pareció que los tres chicos (y sus pianos, coros, etc pregrabados) tocaron a medio gas, casi a velocidad de autopista limitada -con la frustración que implica- en vez de la celeridad de crucero con la que les imaginabamos.

Que la prensa británica ensalce a un grupo como The Vaccines hacia los primeros puestos antes de facturar su disco de debut, puede parecer sospechoso e incluso incitarnos a la desconfianza, pero lo cierto es que The Vaccines se han metido a la crítica y al público en el bolsillo a base de un pildorazo de pop.rock anti-alérgeno recetado por Justin Young. Nada mejor que comprobar con su directo que los hypes funcionan, ahora tendremos que esperar que se mantengan, algo que no dudamos si mantienen el ritmo que ofrecieron en el d-code con sus temas más aguerridos. Los británicos repasaron su LP ‘What Did You Expect From The Vaccines’ haciéndonos vibrar con la ramoniana ‘Wreckin Bar (Ra Ra Ra) como posesos, gritamos con ganas el ‘If You Wanna Come Back It´s Allrigh It´s Allright’, rozaron tempos más épicos con ‘Wetsuit’ y nos ganaron con señores singles como ‘Post Break-Up Sex’, un sonido veraniego, algo de punk, un poco de pop soleado con cierto toque pet-sounds lo-fi y la bendición de la New Musical Express , nos hizo entrar notablemente en su juego. Amén.

The Hives era uno de los grupos que más esperábamos ver en directo desde hace años y, por suerte no defraudó. Carismáticos hasta decir basta, ataviados con sus mejores trajes de gala nos destrozaron el cuerpo bailando y saltando a ritmo de todos esos hits que componen su ya clásica discografía como ‘Come on’, ‘Main offender’, ‘Go right ahea’ y ‘Die alright’. Derrochando energía y pose garage-punk-rock, los Hives siguieron cual metralleta dando al público lo que quería, una buena fiesta, empujones y gritos varios, hasta el punto de ser la primera banda en ofrecer un bis, triple, donde tuvo cabida, como no, ese himno indie de los 2000 que fue el ‘Hate to Say I told you so’. Sin duda, uno de los mejores conciertos desl festival, un directo potentísimo y esperado que elevó muy mucho la nota media del dcode.

Los ingleses The Ting Tings tiraron de procedencia geográfica y dieron rienda suelta a ese Madchester discotequero que llevan dentro. A pesar de seguir exprimiendo hasta la saciedad su LP ‘We Started Nothing’ los allí presentes seguíamos con ganas de continuar la fiesta post-Hives y volvimos a aplaudir los pepinazos de pista de baile que son ‘Great Dj’ , ‘Shut Up And Let Me Go’ o ‘Keep Your Head’ o su discotequero ‘Hands’ . Quizás la mejor baza de su actuación esa noche fuera que se enfrentaron a un público sediento de bailes y electrónica aderezada con una iluminación que incitaba a corear sus requete-pinchados hits , una buena manera de seguir soltando adrenalina y dejar suela por el recinto en una de las actuaciones que por sorpresa mejor sentaron al público.

Tras la pseudo-electrónica de los Tings Tings, le llego el turno a otro de los, inicialmente, grandes. Kasabian. Había mucho hype y expectación por ver a los ingleses en el festival y, a pear de que su concierto no llegó a las cotas de potencia que muchos esperábamos, pasó el listón.  La banda de Leicestershire dio un concierto correcto, de brit-pop noventero en toda regla y demasiado alargado que comenzó con ‘Club Foot’ y poco a poco fue desinchándose ‘Underdog’ , ‘Fast Fuse’ y ‘LSF’. Especialmente poco potente sonó ese hitazo que es ‘Vlad de Impaler’ o ‘Fire’. Incluso tuvieron que tirar del clásico del surf-rock ‘Misirlou’ de Dick Dale que, si hubieran estado los coronas entre el público, se hubieran mofado de ellos hasta decir basta ante tan mediocre interpretación. Abusaron de la trompetilla Beirutiana que tan de moda parece estar en estos días… Sin duda una de las mayores decepciones del festival.

The Sounds son esa banda que escuchas y bailas y quieres ir a ver cuando tocan cerca de tu ciudad, pero cuando su show vuelve a ser el mismo una y otra vez van perdiendo fuelle, y es que es inevitable no corear y pegarte una buena sudada bailando esos temazos que son ‘Tony The Beat’ o ’24 Hours’ ( gran disco ‘Dying To Say This To You’) o ‘Queen Of Apology’ pero sus posteriores trabajos no han acabado de dar el tirón necesario, y esto se arrastra al escenario. Maja Ivarsson desprende una sensualidad que llena el hueco que deja en ocasiones su tirón vocal, esto unido a una legión de incondicionales que hicieron el papel de avanzadilla alrededor del escenario para que la batalla no pareciera del todo perdida para los suecos .

Con una Alice Glass mucho más comedida y fría -de lado quedaron la linterna/bombilla de mano para iluminar por debajo de su camiseta, el dejarse la garganta en gritos atronadores o el tirarse al publico a que manoseen a discrección- Crystal Castles presentaron su electronica hardcore/excesiva/chiptunera/oscura/extraña/… continuen a placer de una manera acorde al pequeño giro introducido en su último lanzamiento: terrenos menos brutos e inicios de algo más melodico en la voz. En el concierto presentaron tanto temas de esta nueva entrega como ‘Fainting Spells’ o ‘Not in love’ -el maravilloso single que grabaron con Robert Smith- con los reconocidos ‘Alice Practice’, ‘Crimewave’ o ‘Untrust Us’, demostrando un directo brutal que no pierde fuerza en posteriores pases y que es capaz de facturar una música casi extraterreste (‘Baptism’) como extrañamente pop (‘Celestica’) de una manera extrañamente certera.