28 marzo 2024

Hace poco he renovado mi PC. Ya era hora de meterse en el mundo de los microprocesadores de 64 bits y doble núcleo. La cosa es que con el cambio también he aumentado considerablemente el espacio de almacenamiento de datos, y claro, cuanto más espacio, más cosas se meten. Ya se sabe, por mucho que se tenga nunca es suficiente.

Al aumentar considerablemente el espacio y, por lo tanto, los datos, se hace un pelín complicado administrar toda esa cantidad de información, así que me puse a buscar información sobre buscadores de datos para el escritorio. Y buscando, buscando, me encontré con estos pocos para las distintas plataformas que se usan hoy día a nivel de usuario. Vamos a ello:

Windows: Aquí no he buscado mucho, pero la verdad es que sólo hay dos opciones claras: O usas el buscador que viene integrado en el sistema o te decantas por Google Desktop, muchísimo más potente. Lo he visto en acción y la verdad es que merece la pena. Es rápido, eficaz y fácil de usar. Además, Google Desktop también está disponible para Linux y Mac.

Mac OS: Por estos lares tampoco hay que buscar mucho, el propio buscador que viene integrado en el sistema es más que eficiente. Se trata de Spotlight, un buscador accesible desde el escritorio que encuentra todo lo que le digas.

Linux: Aquí entramos en mi territorio. Aparte de la opción de Google Desktop (que no he probado en mi sistema) existe Beagle, un buscador con ya bastante tiempo a sus espaldas que cumple bastante bien, pero sin deslumbrar todo lo que debería, o eso me apreció a mi cuando lo probé.
Si nos metemos ya en escritorios concretos como Gnome, nos encontramos con Tracker, el indiscutible sucesor de Beagle para este entorno. Se basa en la búsqueda por medio de la extracción de la información de los metadatos de todo lo que tengas almacenado. Yo lo he instalado hace poco y desde luego los resultados son realmente buenos. La búsqueda es casi instantánea y además la integración con el escritorio de Gnome gracias a Deskbar lo hace casi imprescindible.
Para KDE no he encontrado mucha información, salvo algo que he visto por ahí llamado Strigi, que al parecer se formará parte del cada vez más cercano KDE 4.

Instale lo que se instale uno, el resultado final es pasarse una tarde mirando que es lo que se tiene almacenado y sorprendiéndose mucho con los resultados.