24 abril 2024

Poco a poco Valladolid vuelve a la normalidad musical en el mes de Septiembre tras un duro verano en el que no ha habido más que 2 ó 3 conciertos en la ciudad.

Inauguraba esta temporada de Septiembre la nueva programacion del Auditorio Miguel Delibes (cuya nueva imagen corporativa es una auténtica gozada por cierto, ya era de hora de que se pusiesen las pilas en diseño de cartelería, creatividad y web) y para ello eligieron uno de los eventos que más publico suele convocar, un concierto de bandas sonoras de clásicos del cine.

Como por aquí somos muy cinéfilos y melómanos, lógicamente no podíamos perder la oportunidad de escuchar con la OSCYL conocidos temas del cine, pero, lo cierto es que, podríamos habernos quedado en casa (o viendo a Soul Gestapo) perfectamente.

No vamos e comenzar a criticar demasiado (esos tiempos de juventud rabiosa y criticona ya pasaron en notedetengas) pero la verdad es que el concierto nos defraudó bastante debido a la pobre selección de temas de BSOs típica y tópica a más no poder. Claro, sonó Casablanca, la infumable y más que trillada Memorias de África, Amarcord, Vértigo, La Lista de Schiendlier para la lagrimilla fácil del personal, etc. y es que parece que sólo hay 10 grandes bandas sonoras en la historia del cine y el público es lo que quiere escuchar. No sabemos a quién se le ocurrió la “genial” idea de incluír la nefasta y trilladísima banda sonora de Piratas del Caribe (la única actual junto a la fanfarria de El Señor de los Anillos) que por cierto es en el tema que más se pudo lucir la OSCYL ya que en el resto la mitad de la orquesta estaba desaprovechada.

Como era de esperar, los temas más disfrutados y aplaudidos fueron el de Star Wars y Jurassic Park, pero, de nuevo, y a pesar de que nos encanten, más de lo mismo.

En definitiva, un recital correcto, hasta arriba de público como era de esperar pero en el que se echa en falta una investigación ligeramente más profunda en las grandes BSOs de la historia del cine. Por proponer algunos temas poco explotados en este tipo de recitales se nos ocurren grandes bandas sonoras clásicas como Taxi Driver, Regreso al Futuro, Gremlins, y otras más modernas como La Princesa Mononoke, La Fuente, El Verano de Kikujiro, Star Trek, etc.

2 comentarios en «Crónica del concierto de Música de Cine con la Orquesta Sinfónica de Castilla y León en el Auditorio Miguel Delibes de Valladolid»

  1. De acuerdo en que la elección fue nefasta. Por otro lado, el comportamiento de los propios músicos fue bastante seco por no decir desagradable, ya que mientras les aplaudimos no sonrieron ni una vez (el director sí, por suerte). Parecía que les jodía estar allí tocando “música para el populacho”

Comentarios cerrados.