El pasado 3 de Noviembre, la formación pucelo-madrileña Hoy Muero Viernes actuaron junto a los suecos Bye Bye Bycicle, de la mano de la asociación cultural FikaSound.
De un tiempo a esta parte FikaSound se encarga de acercarnos las propuestas nórdicas musicales más atractivas a nuestros escenarios, una propuesta poco habitual, arriesgada y agradecida por todos los amantes de la buena música. Más si cabe cuando los grupos suecos te dan un bolazo como suele ocurrir y como fue el caso de los Bye Bye.
Para empezar, Hoy Muero Viernes, tomaron el contacto con la sala, ‘somos pocos, pero bien avenidos’, y es que la sala aún estaba un poco falta de gente, pero no fue un impedimento para que Ricardo y compañía nos hicieran partícipes de su Yo También Odio A Mercedes Milá. Con ramalazos de pop electrónico y ruidoso en ciertos momentos, con temas que podían recordarnos tanto a Dorian como a Blas Y Las Astrales, letras afiladas, pop cañí y ritmos para todos los gustos. Fueron desgranando su EP sacudiéndonos con El Discreto Encanto De La Clase Media, descubriéndonos Madrid con Miedo Y Asco En Las Ventas, o cerrando con un pelotazo que no tiene desperdicio Semáforos Ardiendo (Entre Sol Y Gran Vía) . Incluso se atrevieron a versionar a Nina Simone llevando a la diva a su terreno para finalizar en un r&b punkarra y desenfadado.
Nos recordaron que a veces hay que hacer Que Tiemblen Las Montañas e incluso nos presentaron temas nuevos, hasta dedicados al propio local de ensayo de la banda. Una propuesta gamberra (echad un vistazo además a sus vídeos) y con un dance-punk atípico y con solera nueva ola made in Spain que se te mete en la cabeza y recuerdas sobre todo ¡cuando pasas entre Sol y Gran Vía!.
Tras ellos, Bye Bye Bycicle , formación que data desde 2002 y que llegaron desde un pequeño pueblecito de Suecia, para presentarnos su reciente album Compass .Influenciados por la New Wave , el brit y el glam y con el añadido de estar aderezado con arreglos vocales (corales) e instrumentales que faltaron en la puesta en escena en este directo , pero que no hicieron desmerecer en absoluto el combo que se mostró cómodo y encantado de estar en una sala que podía albergar más habitantes que su propio pueblo tal y como comentaban.
Los componentes de la banda fueron incorporándose a filas y de inmediato tiraron de temazo vocal , porque vaya vozarrón tiene André Vikingsson , Agent, donde el puntito ochentero que reinaría toda la noche se podía palpar desde los primeros acordes, para proseguir con WestSide, y probar nuevos temas ,no incluidos en su disco de debut, como Over The World.
Elegancia en la orquestación de la banda, ritmos y una pose de André (no paraba quieto el jodío) que podrían oscilar entre Morrisey y Robert Smith, tanto por los gestos como por registros vocales, comparaciones inevitables con bandas como The Cure o Duran Duran o sin alejarnos tanto del espacio tiempo, con similitudes a sus vecinos Shout Out Louds. En definitiva muy deudores de los nuevos románticos pero con esa carisma que caracteriza a los grupos suecos .
Animándose también a bailar entre el público siguieron repasando Compass con Haby Bay y sonido ‘disintegration’ total con Full Moon; nos narraron eso de I Was A Dreamer, y se despidieron con unos bises para los que dejaron uno de los trallazos de su disco ,Navigation.
Una delicia para disfrutar en sala pequeña, y una oportunidad única de descubrir lo que se cuece por otras latitudes gracias a iniciativas como las que Fikasound lleva a cabo en distintos puntos de nuestra geografía, tras esto sólo podemos espera a poder decir de nuevo por nuestro país algo como Hi Hi Bicycle!
