El miércoles 8 de octubre Jacobo Serra pasó por las tablas del Costello, en Madrid. En formato trío, con Nacho García a la percusión y Alfonso Ferrrer al bajo, intercaló en el repertorio temas de su EP “The Word I Never Say” con otros de su recién emancipado LP “Don’t Give Up”. Un directo marcado por la elegancia y el saber hacer.
Contó con Junior Mackenzie como artista invitado. Le tocó a éste la difícil tarea de colocarse delante de una sala en la que aún está entrando el público. Se defendió reivindicando un par de veces la existencia del telonero y le ayudaron cortes como ‘Folsom Prison Blues’ o ‘Long Way to Walk’, sacados de la América de pistolas de ‘True Detective’.
Llegó el tiempo de Jacobo Serra. Abre la veda con ‘Don’t Give Up’, y lo hace casi a cappella, alejándose de un micrófono que no necesita. Sigue con ’26’, terminada un 26 de diciembre en el que probablemente llovió menos que este octubre en la capital. Los primeros valientes le acompañan, y él sonríe tímido y se acaricia la nuca.
Dedican ‘On & On’ a quienes se levantan a las cuatro o cinco de la mañana, como su guitarrista. Por alusiones sube al escenario Ángel Carmona, capitán de ‘Hoy empieza todo’ en Radio 3 y, por lo que se ve, gran madrugador. Se queja del desorden del camerino cuando entra a por su guitarra, adornada con una pegatina de la Rana Gustavo. Empiezan con una batería protagonista, bailan y se dejan ser.
Armado con un banjo, Jacobo avisa “vamos a probar la acústica de la sala” y utiliza ‘Snapshots Of My Heart’. Chasqueamos los dedos, mientras tararea y hace con la boca el sonido de la trompeta que le falta. Nacho García le respalda cuando canta eso de “people tell me I am mad”.
Se encoje de hombros y se ríe. Desnuda y lleva a su expresión más mínima ‘The Word I Never Say’, tema que da nombre a su primer EP. Palmas para presentar a sus escuderos, y unos segundos instrumentales que los conducen a ‘What I Was Told’. Levanta un lado del labio, soportando la decepción y el destierro que cargan la canción.
Tras recuperar ‘All Around’ y ‘The Party’ le toca a ‘Never Gone’, inspirada en la música japonesa. Serra lo explica y lo demuestra. “Quería decíroslo, por si no os habíais dado cuenta”. Cuando acaba con ella todo son aplausos.
Dibuja solo los primeros acordes de ‘Long Ago’, sin apoyos. Aun así, la sala le hace de coristas. La conscientemente inocentona ‘Empy Promeses’ abre paso a ‘No Way’, que sirve de entreacto. Vuelve a subir Carmona, arrastrándola a una versión más eléctrica. Se despiden y se van, no muy convencidos. De fondo se oye una petición de blues.
Vuelve Jacobo, frente a un silencio que asusta y se mantiene todo lo que dura ‘Fly Away’. Respeta uno de los momentos más íntimos e intensos de la actuación. Desde el fondo insisten después con lo del blues, y termina aceptando. Un “venga va, voy a hacerlo” y aparece Johnny Cash cada vez que cambia la voz. Como contraataque y despedida escoge ‘Say It Loud’.
Lo dicho, folk y talento puro.
