25 abril 2024

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Magnífico concierto el que ofrecieron ayer los ingleses en la sala Razz de Barcelona previo a su paso por el festival SOS 4.8 de Murcia. Y es que los Kooks nunca defraudan, sabemos lo que podemos esperar de ellos y nos lo dan con creces: rock optimista y luminoso, energía y vitalismo en unas canciones ideales para corear.

Pero antes pudimos descubrir el entretenido grupo telonero “El último vecino”, una formación electro-pop bastante interesante con reminiscencias a la movida madrileña pero también a grupos como Joy Division, Stone Roses y a  otra movida, la mancuniana de finales de los ochenta. Se pusieron en el bolsillo al público través su sonido compacto, la teatralización de su frontman Gerard Alegre, y esa originalidad difícil de encontrar hoy en día.

Tras semejante aperitivo, nuestros protagonistas entraron de modo afable para colocarse en sus puestos y abordar de inicio potentes hits como “Ooh Laa” o “See The World” ante el fervor de los presentes. Luego poco a poco fueron desgranando sus tres discos publicados hasta la fecha, y el mas difícil todavía: presentar las desconocidas canciones de su disco a punto de publicar “Listen”.  Y es que no resulta nada fácil empezar una gira antes de que salga al mercado un nuevo trabajo, ya que obliga a interpretarlo sin que el respetable pueda identificar las piezas ni cantar los estribillos, algo que muchas veces se traduce en bajones. Pero no, el cuarteto (ayer quinteto) se entregaron de tal manera que las flamantes canciones sonaron atractivas y contagiosas, creando una expectación  y necesidad de hacerse con ellas cuando salgan a la venta. Para lo nuevo van a tirar de sonidos ochentenos con tintes funkies, muy a la onda de Prince o del primer Lenny Kravitz, todo ello sin perder ni un ápice aquel espíritu jovial britpopero que siempre les ha acompañado.

Pero los mejores momentos llegaron de la mano de sus temazos “She Moves In Her Own Way”,  “Seaside”, “You Don’ t Love Me”,  “Always Where I Need To Be”, “Eddie’ s Gun”, “Sofa Song” y la final “ Junk Of The Heart”. Tampoco faltaron el nuevo single que ya conocíamos “Down” (de su homónimo EP) ni un breve amago de “Obla-di Obla-da” de los Beatles a cargo del carismático líder y vocalista Luke Prichard.

Los obligatorios bises nos trajeron la nueva y chisposa “Forgive & Forget” y la esperadísima “Naive”, que cerró el reconfortable evento musical que nos recordó que muy a menudo echamos de menos grupos como ellos, sin pretensiones, llenos de calidad y sobre todo, fáciles de disfrutar.