29 marzo 2024

drianpost

Tras las múltiples actuaciones de diferentes grupos como: Sidonie, La habitación roja, Maga, Violadores del verso, Miss Caffeina, Big Boss Man o piano Magic a lo largo del mes de Marzo en la ciudad de Valladolid de manos del festival VALLADOLINDIE siendo este año su 15º aniversario, el Jueves 18 de marzo tuvo lugar el penúltimo concierto en la sala Mambo del joven grupo barcelonés DORIAN, conocido grupo formado por Mark: Voz y guitarra, Belly: piano y programaciones, Bart: Bajo y Jordi: batería.

Comenzó su andadura en el 2002 mostrando una mezcla de estilos entre el pop español y la música electrónica contemporánea, con la que consiguieron ganar adeptos a su sonido y poder mostrar su música por diferentes lugares de la geografía española, también, gracias a que ganaron el primer premio del concurso de maquetas del festival Zorrock en el 2003.

Esta vez Dorian simpatizó con el público vallisoletano cantando temas, sobre todo, de su nuevo LP, grabado en el 2009 “Cuidad subterránea”. El concierto apenas duró hora y media ya que como bien dijo Mark, “la sala no nos deja más tiempo” y lamentaba no poder entregarse al público con novedades y otras sorpresas propias de un directo.

Comenzaron igual que abre su nuevo disco, con Simulacro de emergencia haciendo saltar y disfrutar al público allí presente que hacía pleno la sala. Continuaron cantando el resto de temas del disco como: estudios de mercado, la mañana herida, o las malas semillas haciendo que el público participara en algunas letras para así ser más cercanos. Pero uno de los puntos álgidos de la noche recayeron en el momento previo a verte amanecer en el cual Mark subió al escenario a seis seguidores del grupo ataviados con camisetas con el nombre de Dorian y la ciudad de donde provenían, Zamora.

Otro de los momentos estelares fue la canción a cualquier otra parte que pertenece a su anterior disco “El futuro no es de nadie” (2006) en ela que el público disfrutó y cantó al unísono este ya himno pop. El punto melancólico y menos electrónico vino se manos de la canción solar en la cual bastó una guitarra y las voces de toda la sala para sonar.

Un concierto con pocas sorpresas, muy previsible y algo corto de duración, pero estas carencias hacen contraste con el buen sonido, las buenas canciones y su sonido electrónico y amable que hizo disfrutar al público.

+ Reportaje fotográfico completo de Dorian en Valladolid

por Nuria Adalia