Hoy compartimos con entusiasmo “IX”, el segundo sencillo de En Blanco, el nuevo álbum de Fon Román, inspirado en el poema “Blanco” del Premio Nobel mexicano Octavio Paz.
En esta sección del poema, el autor nos sumerge en un universo más erótico, explorando la fusión de opuestos y la experiencia de la unidad del ser. Desde el punto de vista musical, la canción presenta dos partes distintas: una inicial más enérgica y dinámica, seguida por una segunda más onírica y contemplativa. Los invitamos a sumergirse en esta experiencia.
Como adelanto…
“caes de tu cuerpo a tu sombra
no allá sino en mis ojos
en un caer inmóvil de cascada
cielo y suelo se juntan
caes de tu sombra a tu nombre
intocable horizonte
te precipitas en tus semejanzas
yo soy tu lejanía…”
-Fon Román-
Fon Román publica este año #EnBlanco
Pronto descubriremos al completo el nuevo proyecto multidisciplinar de Fon Román basado en la obra Blanco, del poeta y ensayista Octavio Paz, Premio Nobel de Literatura.
“En Blanco” fue la respuesta poética de Paz al profundo impacto que causó en él la cultura budista durante su estancia en la India como embajador de México Se publicó en 1967 bajo un formato muy atípico, treinta y dos hojas de papel continúo alargado como un pergamino. Es una experiencia místico-poética que pasó enseguida a la historia como una pieza esencial de la modernidad literaria.
Ahora En Blanco es resignificado por Fon Román a través de la música: un disco de once canciones, una edición limitada de trescientos vinilos, una escultura cinética y unas visuales que recogen las indicaciones que dio Octavio Paz y funcionan como una coreografía que le añade profundidad y magnetismo al concierto, llevando al espectador aún más dentro del poema.
“Decidí componer las canciones de En Blanco manteniendo la lectura continua. Aproveché los silencios y las distintas tipografías que el autor utilizó entre espacios para dividir el poema en once partes, cada una de ellas corresponde a una canción. De esa manera mantuve intactos tanto su contenido como su estructura”, comenta el compositor.
La obra reivindica el poder de los espacios en blanco y rinde homenaje al espacio sagrado de la creación, un ritual de versos en movimiento llevados a la música, donde cabe también el silencio.
