Con su bombín calado, con sus versos de seda, Joaquín Sabina vuelve a nuestra ciudad a presentarnos su último disco Vinagre y Rosas tras casi un lustro de silencio musical, que no literario. Dos años después de su anterior visita en la que estuvo acompañado por su amigo Joan Manuel Serrat como parte de la gira Dos Pájaros de un tiro, en esta ocasión llega en solitario a arañarnos el corazón y recordarnos que, a sus cincuenta y diez años largos, Sabina sigue siendo tan canalla como siempre.
Con su todo es ahora, con su nada es eterno, a lo largo de sus más de 30 años de carrera, Sabina ha tenido una vida intensa y ha sabido vivir para cantarlo. Cantautor, músico, rockero, poeta; compositor de himnos como Pongamos que hablo de Madrid, irreverencias como Manual para héroes o canallas o de confesiones desgarradoras como Y sin embargo, Sabina se ha ganado a pulso el título de maestro y se ha convertido en uno de los referentes más respetados del panorama musical de nuestro país.
El concierto será el próximo sábado 26 de junio en la Feria de Muestras a las 22:00 y las entradas pueden adquirirse en Ticketcyl por 36 euros (33 euros de entrada más 3 euros de gastos de distribución).
Aunque muera el verano y tenga prisa el invierno, Joaquín Sabina sabe que le esperamos en Valladolid.
Enlaces externos:
httpvh://www.youtube.com/watch?v=Qc-v2zjrO0I
Genial el texto….
Deseando que llegue el día 26 😀
¿Es Joaquín Sabina el cantautor más sobrevalorado del pop español?
Gracias, Bea, una hace lo que puede :).
Fernando, eso depende de la arrogancia de quien crea conocer el verdadero valor de algo tan subjetivo como un artista.
No sé por qué va a ser arrogante pensar que Sabina está sobrevalorado, por esa regla de tres también lo sería pensar que está infravalorado porque también implica “creer conocer su verdadero valor”. Ahora va a resultar que si tus opiniones difieren de las de mayoría eres arrogante.
Más allá de subjetividades el hecho es que sus letras están cortadas todas por el mismo patrón. Vamos desde mi punto de vista está MUY sobrevalorado, pero mucho.
No me malinterpretes. Si tus opiniones difieren de las de la mayoría, solamente eres minoría, por definición. Y eso no es ni mejor ni peor. Sólo pienso que declarar algo como sobrevalorado (o infravalorado, es igual, en ningún momento he puesto en duda esa regla de tres) implica que se cree conocer el valor objetivo del músico (escritor, cineasta, artista en general) en cuestión, y eso es lo que me parece arrogante. Una cosa es opinar que te gusta tal o cual cosa y otra sentenciar que está “sobrevalorada”, porque ahí, aparte de creer que tu forma de pensar es más objetiva que la del resto, estás cuestionando la manera de opinar del resto del mundo, cuyas opiniones son tan válidas como la tuya, formes o no parte de la masa. Por eso, personalmente, ni siquiera digo que Sabina NO esté sobrevalorado porque no conozco el límite donde colocar ese “sobre”.
Pues no estoy de acuerdo. Que yo considere que algo está sobrevalorado lo único que quiere decir es que me gusta menos que al resto del mundo y que encima no entiendo por qué a los demás le gusta tanto (porque algo puede no gustarme pero entender que a otros les guste). Sobrevalorado se refiere al grado de entusiasmo que muestra la gente ante algo más que al valor intrínseco de ese algo, porque efectivamente esto son cuestiones totalmente opinables y si mi opinión es la de no entender a qué viene tanto revuelo, no por ello estoy considerando que las opiniones de los demás sean menos válidas, simplemente no las comparto y punto. Ni tampoco me creo más objetivo que los demás, Dios me libre.
Según tú, jamás se podría aplicar el término sobrevalorado a ninguna manifestación artística y eso me parece un empeño en ser políticamente correcto un tanto exagerado.
Discrepo. Es un empeño de tocar un poco las narices y ser un poco más pedante de la cuenta, que discutir estas cosas es muy divertido :P.
En realidad estoy de acuerdo contigo, y muchas veces (a veces demasiadas, que también soy un poco gafapasta) declaro alegremente que ciertos artistas están sobrevalorados (ejemplo, pienso que por ejemplo Vetusta Morla están CLARAMENTE sobrevalorados,jeje).
Sabina tiene tantos defensores como detractores, y si a sus defensores más acérrimos les gusta el patrón por el que corta sus canciones, es normal que lo suban a los altares. Yo he crecido con su música y me parece que tiene canciones realmente inspiradas, pero no me gusta todo ni mucho menos. De hecho, me parece que el último disco deja un poco que desear, pero bueno, es una opinión subjetiva, ya sabes ;).
De todos modos está bien hacer un ejercicio de humildad de vez en cuando y plantearse si cuando se dice que algo está sobrevalorado es porque no se entiende por qué a la gente le gusta tanto o porque uno cree que su criterio es mejor que el de los demás. Y eso me lo digo tanto a mí como al resto de modernos que a veces tendemos a pensar que en cuanto algo es un poco “mainstream” ya es malo casi por definición.
Bueno, me alegro de que tú también consideres que ciertos artistas están sobrevalorados, aunque cuando yo he dicho lo de Sabina no lo he dicho porque sea “mainstream”, de hecho esa asociación indie= bueno mainstream=malo me pone de los nervios (parece mentira pero hay mucha gente que no quiere que sus artistas preferidos sean conocidos por todo el mundo, cuando yo no le vería más que ventajas). Pero está claro que algo indie va a estar dificilmente sobrevalorado cuando precisamente el ser indie consiste en ser algo marginal.
Estoy de acuerdo contigo. De hecho, a mí lo que me pone de los nervios es el tag ‘indie’, que paradójicamente se ha puesto de moda. Y sí, yo también me alegraría de que los artistas ‘marginales’ que me gustan lo fueran menos, aunque sólo fuera para tener más posibilidades de poder ir a alguno de sus conciertos. Me alegro de que la crítica a Sabina no fuera porque es mainstream sino porque no te gusta y ya está ;). Y, por favor, no te tomes a mal mis palabras, que solamente me gusta crear un poco de controversia de vez en cuando.
Tranquila que no me las he tomado a mal, confieso que a mi también me encanta ponerme a polemizar cuando encuentro la mínima oportunidad!