24 abril 2024

La presencia de Solomon Burke en concierto dentro de la programación estival de Las Noches de San Benito de Valladolid es un lujo al que nadie podía renunciar.

Y es que más allá de que estemos hablando de uno de los miembros del prestigioso Rock And Roll Hall Of Fame o de un cantante cuyo nombre figurara entre los más prestigiosos vocalistas de la historia del soul junto a Sam Cooke, Curtis Mayfield, Otis Redding o James Brown, es que estamos ante uno de los grandes valores del género en activo y que conserva aún la capacidad de realizar un gran concierto.

Acompañado sobre el escenario por una docena de músicos (trío de vientos, batería, bajo, guitarra, Hammond, teclado, dos violinistas y otras tantas coristas), convenientemente sentado en un ostentoso trono rojo (Solomon se desplaza en silla de ruedas fuera de las tablas) y rodeado de una iconografía excesiva y barroca, transformó el frío ambiente del patio de San Benito en una celebración musical en la que desde el instrumental de apertura “Chicken Shack”, pasando por las nuevas composiciones de “Nothing is Impossible” como el tema título, clásicos propios, “That´s How I Got To Memphis”, la impresionante “Cry to Me”, Down In The Valley (una auténtica fiesta), “Don´t give up on me”, o la archiconocida “Everybody Needs Somebody To Love”, en un club de baile en el que los presentes abandonaron sus sillas para disfrutar bailando un repertorio en el que continuamente aparecían standards de los años 50 y 60 como “Georgia on My Mind”, el blues de “A Change is Gonna Come”, “Sittin on the Dock of the Bay” (muy transformada), “Stand By Me”,” I Will Survive” (donde las mujeres presentes fueron invitadas a subir al escenario), “Lucille”, “Tutti Frutti”, “Proud Mary”, “Rock This Joint”, “What a Wonderfull Word”…

Pero lo fundamental fue disfrutar de una voz conservada en un estado prodigioso que navegó partiendo del soul más clásico hacia terrenos que se adentraban tanto en el gospel (con los coros de dos de sus 84 nietas), el blues, el cajún (trasladándonos al carnaval de New Orleans con regalo de collares de colores incluidos), o el rock and roll clásico y donde se apreció el gusto del maestro Burke por el country, herencia de su vida en Nashville, y que se manifestó en la presencia de dos violinistas que aportaron un toque especial en algunas composiciones y “chirriaron” en otras como en el clásico de Louis Amstrong, pero que mantuvieron en continuo movimiento a los asistentes durante la hora y media que duró el show y del que Solomon Burke se despidió, como un auténtico caballero, regalando rosas a las damas y recordándonos que esta es quizás una de sus últimas giras mundiales.

Un auténtico espectáculo musical de sabor típicamente americano, tanto por su escenografía y parafernalia como por los aires de gran estrella del orondo vocalista, emparentándole por momentos con el gran James Brown, y que ha puesto el nivel muy alto para los futuros grandes conciertos que van a tener lugar en la ciudad.

Siendo predicador y teniendo al señor de su lado tiene que ser difícil ser vencido.

Por Fran Cea

1 comentario en «Solomon Burke @ Noches en San Benito 2010 (Valladolid: 14/7/10»

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