28 marzo 2024
La Gran Belleza : Crónica del concierto de Bonobo en Madrid, sala La Riviera. Marzo 2017.

¿Sold-out a meses vista y enormes expectativas ante Bonobo en formato banda? Pues sí, en aquellas andábamos sin lugar a dudas desde que nos enteráramos el pasado año de su primer bolo con banda en la capital.

Simon Green no factura una electrónica industrial y sin matices, lejos de ello, su amplia amalgama de influencias y sonidos nos hace pensar en un auténtico gurú de los sonidos, en un alma libre que usa la electrónica como un medio de transporte más para llegar a destinos que van desde el free-jazz, el trip-hop, el soul o el EDM customizado en zonas templadas y dotando a sus composiciones de vida propia ejercitada por su potente banda y sus hipnóticas visuales.

El directo en La Riviera fue un hito que el británico supo aprovechar, puesta en escena, sonido impoluto, público más que entregado y grandes éxitos que compaginaba con su último retoño, el inmenso ‘Migration‘.

Sección de vientos, vozarrón femenino acompañando, el de Szjerdene , cuerdas y percusiones que se hermanaban con las grabaciones y sonidos sintetizados, lo que viene a dar sentido a eso de decir que ‘vamos en formato banda’. Si bien los comienzos fueron más suaves, la progresión hacia los himnos iba in crescendo durante todo el recital. La sutileza de ‘Migration‘, la sensualidad en ‘Break Apart’ y ‘Surface’, el subidón masivo de ‘Kerala’ fueron algunos de los momentos gloriosos en directo de su nuevo LP. Si a ello le sumamos una incursión temprana y encantadora en The North Borders’ con temas como ‘Towers‘ o ‘‘First Fires’.

En ocasiones todo el peso del directo recaía sobre el propio Simon, mientras su banda descansaba, la electrónica más asalvajada salía de sus manos, ¡y joder, cómo nos gusta eso!. Ya en temas como ‘Bambro Koyo Ganda‘ no podíamos sino gritar al ritmo de los frenéticos bajos de los británicos, y fundirnos en uno con la música, ¿Acaso no es esto mágico?.

Cirrus‘, subidón masivo imparable, ‘No Reason’ sin Nick Murphy pero igual de efectiva, ‘Kerala‘ multi-orgásmica y el último baile al son de ‘Know You’ nos llevaban a la recta final a través de una descarga de endorfinas musicales, un camino hacia la felicidad plena, un sendero hacia las grutas ocultas de la belleza bañada en la electrónica.