Ya hemos perdido la cuenta de las veces que hemos visto a Arizona Baby y Los Coronas en Valladolid, en festivales, en conciertos de otras ciudades y demás, pero, sin duda, nunca habíamos disfrutado tanto como en el concierto de clausura del festival Valladolindie 2011.
Había ganas de ver el proyecto Corizonas, comúnmente conocido como Dos bandas y un Destino” en valladolid ya que la última actuación de Arizona Baby fue en el mes de Noviembre en el Teatro Calderón (donde dejaron caer un par de temas nuevos de esta colaboración musical) y a Los Coronas en el Festival Matatón 2010 en un frenético concierto.
Este atractivo proyecto musical con reiminiscencias de las super bandas de rock americanas de los 70 (en ocasiones recuerda el concierto final de The Band filmado por Martin Scorsese) ha batido récrods allá por donde ha pasado, y es que el combo Arizona Baby + Los Coronas es, sin duda, un cóctel explosivo de rock and roll en estado puro.
Una vez caída la noche comenzaron ambas bandas sobre el escenario y acompañados de unas magníficas y cuidadosamente seleccionadas videoproyecciones con decenas de secuencias clásicas del western, cultura pop, guatequera, surfera y tetazas a go-gó, nos dieron la bienvenida con ese potente Buenas noches amigos que da inicio a su nuevo disco grabado en directo. Lógicamente enloquecieron a los más de 400 asistentes que se dieron cita en el Patio Herrerillo, éxito total de asistencia a pesar de los malos pronósticos del mes de Junio en Valladolid.
El formato de concierto fue curioso, 4 temas conjuntos, cuatro por separado y, para finalizar, otros dos juntos para volver, como no , en más que obligado el bis. Los temas no creo que sea necesario citarlos ya que, sí, tocaron todo lo que tenían que tocar.
Apesar de que hubiésemos preferido algo más de protagonismo del proyecto conjunto en el setlist (se dejaron algunos grandes temas en el tintero), fue fantástico ver como los sonidos surferos de los Coronas les viene como anillo al dedo a los acordes countrys de Vielba y los suyos. Además, se nota que las canciones, todas versiones de clásicos del rock de los 70 y 80 están muy rodadas en el la carretera (como debe ser) sin fallo alguno y que el compadreo fluye en el escenario entre los forajidos, barbudos y sombrereros.
Un concierto de casi 3h de duración que nos dejó con ganas de más, como siempre, y con una afonía considerable al tararear cada riff de guitarra coronil y, como no, el ‘shiralee’ que ya tiene la etiqueta de mítico.
Tuvimos el lujo de contar con ellos en Acordes Urbanos grabando una sesión acústica conjunta que en breve podréis ver, pero, mientras tanto, os dejamos con dos de los vídeos que grabamos el año pasado con cada banda por separado.
Por favor, necesito encontrar el video que proyectaron de tias en tetas bailando en un laboratorio con look a lo 70s!! Alguien se acuerda?? Os suena de qué puede ser??
jjajajaja. qué bueno es! 😀
pues ni idea… la verdad… si te enteras avisa! jaja