El nuevo single de Daft Punk lo ha tenido muy fácil para convertirse en una canción de escucha compulsiva, habida cuenta del auténtico bombardeo al que se nos está sometiendo por todas partes y a todas horas -mientras escribo esto, está sonando en un spot de televisión-, y es que a nadie se le escapa que una canción -por muy modesta que sea, lo cual no es el caso- repetida cientos de veces acaba por terminar gustando a la fuerza -sino, que se lo digan a Maroon 5-. Todo el ruido que está haciendo la vuelta de Daft Punk -no nos extraña que haya quienes ya empiecen a estar un poco saturados– es el que desearíamos para todos los grupos que nos gustan. ¿Os imagináis que alguien os cuenta lo harto que está de oír por todas partes el inminente nuevo single de Franz Ferdinand?
La canción, con ese aire disco y el clásico sonido robotizado del dúo francés a partir del segundo minuto, lo merece. La inclusión de Pharrell Williams como vocalista -justo la semana pasada nos enterábamos de la muerte del que fuera la voz de ‘One More Time’– parece un acierto total, a pesar de los millones de sustitutos que le están saliendo haciendo sus propias versiones -los últimos, Cansei de Ser Sexy-. No teníamos ni idea de que Daft Punk molaran tanto a todo el mundo, pero escuchar ese pegadizo “We’re up all night to get lucky” en un ascensor, en un bar, en un centro comercial y en la radio es tanto más guay cuanto que lo que está dejando de sonar esos cuatro minutos es la mierda de turno de Pitbull. Merci, les français!
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