Ombligo y el dúo peruano Alejandro y María Laura han lanzado “Silencio”, un tema que llega con un significado especialmente emotivo. La canción estaba lista para publicarse cuando la DANA arrasó Valencia, afectando de lleno a Alejandro y María Laura, quienes perdieron su casa en Paiporta. Este contexto da un peso especial a una colaboración que ya de por sí es potente.
El dúo madrileño Ombligo, formado por Ángel Cáceres y Anika Sobrino, ha construido su identidad musical desde los raíles del metro de Madrid. Su estilo, que mezcla swing, balkan, folk tradicional, bolero y hasta toques progresivos, les ha llevado a convertirse en una de las propuestas más interesantes de la música de raíz contemporánea. No es casualidad que su último disco fuera nominado a los Premios de la Academia de la Música 2024 como mejor álbum de música folk.
En “Silencio”, grabado en los Estudios Garlic Records con la producción de Edu Molina, se suman las voces de Alejandro y María Laura, que aportan una calidez y una intensidad emocional difíciles de ignorar. Las armonías y los matices en esta canción hacen que cada detalle cuente, con un sonido que mira a tradiciones antiguas pero sin caer en lo previsible.
La colaboración no es solo una suma de talentos; es una declaración de intenciones. Ombligo no se limita a explorar estilos: los revuelve, los hace suyos y, junto a la sensibilidad de Alejandro y María Laura, entregan una canción que no necesita adornos para brillar. No hay fórmulas fáciles ni modas que seguir; “Silencio” se siente honesto, como si naciera directamente del corazón de quienes lo interpretan.
Ombligo, que ya ha demostrado que su propuesta no entiende de fronteras estilísticas, encuentra aquí un equilibrio perfecto entre la delicadeza y la fuerza. Alejandro y María Laura, por su parte, canalizan un momento personal complicado para dotar a la canción de una sinceridad palpable.
Este tema, además, es un recordatorio de cómo la música puede unir y consolar, incluso en los momentos más difíciles. Un trabajo cuidado, profundo y con el suficiente peso como para dejar huella en la escena musical actual.
