25 abril 2024

La tarde del jueves iba cayendo mientras el equipo de Notedetengas recogíamos nuestros pases para entrar al recinto del Low Cost Festival 2011. Y nada mejor para empezar con buen pie que uno de los conciertos que esperábamos con ganas: Maika Makovski. Con el sol escondiéndose tras el escenario la mallorquina derrochó fuerza para ganarse a un público que poco a poco se acercaba al escenario LCF. Como siempre la enorme banda nos hizo disfrutar de sus grandes temas como Lava Love, Devil Tricks o Ruled By Mars. Los mejores momentos vinieron con los sonidos más tribales de Oh M Ah (y otra canción nueva que no se como se llama) con los últimos rayos de sol cayendo sobre Óscar a la guitarra. Aunque quizá se disfrute más de Maika en la intimidad de una sala, la banda conectó y los 45 minutos de concierto nos supieron a poco.

Tras ellos, uno de los conciertos más elegantes del festival, el elegante Eli paperboy Reed acompañado de su fantástica banda, destacando especialemnte a la sección de vientos, dió una magistral lección de soul a los miles de asistentes que abarrotaron el escenario. Como si de Ottis Redding se tratase, el de Boston, carismático como nadie y haciendo honor a esa increíble voz que le ha catapultado, presentó prácticamente en su totalidad los tema de ese discazo de 2010 que es Come And Get It haciendo bailar a todos los presentes como si estuviésemos en una misa del reverendo Cleophus James o en una de las fiestacas que se montaban nuestros amigos de Animal House en las fraternidades.  Elegancia, magnífica ejecución, soul de calidad y, por fin, algo distinto que se aleja de la clásica fórmula del indie-pop que suele abarrotar este tipo de festivales. De 10.

Tras el conciertazo de Eli, decidimos escuchar, pero de lejos, los conciertos de Eric Fuentes & el Mal y Vinila, cenando y descansando para asistir con energías a Lori Meyers. El primer concierto para las masas hambrientas fue el de los chicos de Granada. La gente se agolpaba desde las primeras filas, hasta donde nuestra vista ya no podía alcanzar, e impacientes cuando las luces se apagaron, comenzaron los acordes de “Rumba en atmósfera cero”, seguido de otros temazos de discos anteriores como “Luciérnagas y Mariposas”, “Zona Errónea”, “Alta Fidelidad”, sin faltar su exitazo “Mi Realidad”, con el cual todo el escenario y público se vino arriba. Estuvieron más que correctos, y sonaron francamente mejor que en otras ocasiones en las que hemos podido verlos.

Y, para acabar la noche, Fangoria. Qué decir de la magnífica Alaska y toda su tropa de vedettes y plumas a cascoporro. La verdad es que el show que montan es inigualable tanto en equilibriio de caspa y glamour y a lo que siempre nos han tenido acostumbrados, y en cuanto a sus temas de toda la vida y a las nuevas remasterizaciones mucho mas cañeras para dar gusto a toda clase de fans; los que se acercaron por ser seguidores desde sus inicios, hasta los más jóvenes, con más ganas de ver al propio Mario Vaquerizo, cuya intervención fue vitoreada por todo el público, que a otras cosas. Gracias al exitoso programa que sin duda ha hecho subir sus cachés, hubo hueco para todo. Un buen fín de fiesta para los que no seguimos con el festival hasta el día siguiente.