25 abril 2024

El pasado 6 de Octubre se organizó un sarao de esos que uno clama al cielo porque se convierta en una cita anual. El 981Heritage ha vuelto con fuerzas, con triple cita y con primera parada en la capital. ¿Emplazamiento? La Nave De Música del Matadero Madrid, ese combo de escenarios y especie de chozas del poblado de ‘Los Otros’ que tiene un volumen brutal y donde si las condiciones climáticas lo permiten, el ambiente es un auténtico lujo dentro de la urbe.

Dos escenarios bastaron para que se diera cita lo más granado de la escena electrónica a nivel nacional e internacional . Partiendo de la premisa de que somos un país donde la fiesta nos tira, ir de festival desde por la mañana y con una música de ésta índole, es una apuesta que blindaríamos de inmediato. Unos horarios perfectos para empezar el vermut, o tomarse la primera caña, unos precios populares no, lo siguiente ; 20€ fue optar por un precio asequible para la inmensa mayoría.  Cartel,horario,precio,emplazamiento ; ya partimos de 4* …

A primera hora, los menos remolones se adentraron en la Nave de Música para disfrutar de la sesión del gallego Judah, un poco de house, un poco de crunk un poco de hip hop y en definitiva una sesión con canela en crudo que nos hizo separarnos de Jeremy Greenspan para repetir ese aperitivo con más aire de la costa neoyorquina que de la costa gallega.

La mitad de los Junior Boys se quedó también en la mitad en su sesión, podíamos decir que esperábamos más de este adalid de la electrónica ; el canadiense ofreció un set donde alternó dub y electrónica de subidón (acorde a la hora) con momentos de bajona y fallos técnicos mínimos pero imperdonables a estas alturas, madrugar a veces es complicado para  estas aves nocturnas.

Noaipre y Erika Spring competían en horarios. El gallego llevó al escenario pequeño una grandeza de estilos que agolpaban grime, hip&hop, bajos retumbantes y electrónica cremosa fueron una constante a la cuál optar durante las horas siguientes, en pequeños o largos tragos, igualmente disfrutables. La ex Au Revoir Simone aterrizaba en nuestro país con nuevo trabajo en solitario bajo su imagen delicada y angelical, todo amor. Acompañada de banda y en formato trío, la de Brooklyn repasó su EP y nos regaló nuevos temas y versiones ochenteras  (Eurythmics) , sensual muestra de dream pop y synth que puso el punto de inflexión al cartel general , mostrando cómo con temas como ‘Like A Fire’ o ‘Happy At Your Gate‘ que lo cortés no quita lo valiente en un festival de ésta índole.

Kode 9 hizo suya la Nave De Música, había ganas de presenciar su set, y ver cómo reventaba la pista entre el techno más atronador o su dubstep, unos sentimientos encontrados que parece quiso redimir llevandose al público a su terreno con un poquito de Burial como traca final.

De lo mejorcito fueron Solar Bears, el dúo irlandés logró llevar sus texturas cósmicas a un bunker donde demostraron que su propuesta en directo puede hacer mucha pupita de la buena al resto del cartel. Beats futuristas y sintes extenuantes marca de la casa que hicieron que no paráramos de movernos a pesar de los calores.

Actress se desvió de lo que nos ofrece en su impecable ‘R.I.P’ para llevar al Live una buena mandanga, trallera y machacona a ratos, con predominio house con un estilo más cercano a temas como ‘Marble Plexus’ que a otros más minimalistas hicieron que Darren nos metiera miedito en el cuerpo tirando de fuerte predominio de los graves y aumentando los biorritmos de brutal manera.

Mouse On Mars son unos reyes, no hay otra definición, si alguien puso patas arriba el escenario fueron ellos, intercarlando en su repertorio temazos de ‘Parastrophics‘ , techno, idm, jungle…y una hora idónea fueron los ingredientes que los alemanes necesitaron para meterse a los asistentes en su rave del atardecer.

Un rato estuvimos viendo la propuesta de oOoOO un set que ensombreció el hervidero en el que se había convertido el escenario Barceló, mucha gente y un poquito de witch house y temas más calmados que los Mouse On Mars , nos hicieron volver a la propuesta de la que veníamos, para reventar zapatilla antes de la actuación de Hype Williams.

Tras una humareda considerable y algo de retraso hicieron aparición en escena Hype Williams , el dúo que transfirió al fin de fiesta un tono electro lo-fi , ruidismo hipnótico, bases codiciosas en graves , apuesta arriesgada pero interesante y para muchos el dúo psycho por escelencia, psicótica psicodelia para acabar una velada que repetiríamos con los ojos cerrados.

Confiamos en la consolidación del 981, un festival y una propuesta más que necesaria para la gran urbe. Cabe destacar que la cita preparada el 15 de Diciembre en La Coruña no tiene desperdicio con cabezas como Holy Other, Lindstrøm y François Kevorkian ¿te lo vas a perder?.