Había MUCHAS MUCHAS MUCHAS ganas de volver a ver a Grises en directo. Ganas que se complementaban con las de poder vivir la música en directo de la mano de un grupo cuyas armas son la diversión, el buen rollo y la entrega que exteriorizan en su puesta en escena.
El grupo de Zestoa volvía a Madrid para presentar su nuevo álbum ‘Talismán’, su sexto álbum de estudio, que lanzaron en medio de la pandemia en 2020. Un disco muy salvaje, pero que sigue guardando esa pieza característica del grupo como son sus veloces ritmos y sus sintetizadores pegadizos.
Un directo, por el cual la banda nos quiso confesar su nerviosismo al pisar Madrid, ya que era la primera vez que realizaban un concierto fuera de su tierra en el País Vasco, tras la declaración del estado de alarma en marzo de 2020. Además, una ocasión que sirvió para presentarnos a la nueva incorporación a la banda, el bajista Gartxot Usain, que sustituyó al grandísimo Raúl.
Metidos en faena y cumpliendo con todas y cada una de las normas de la #CulturaSegura, el público vibró, ‘saltó’ y se divirtió en el céntrico teatro madrileño Muñoz Seca. El concierto fue un pequeño homenaje a toda su carrera musical, mezclando temas de todos sus discos anteriores, como así nos lo hicieron notar con la canción que abrió el concierto, ‘El Impacto’, perteneciente a su anterior disco ‘De peces y árboles’ (2018). A esta, le siguieron canciones como ‘Cactus’ o ‘Wendy’ de ‘No se alarme señora, soy soviético’ (2013), canción con la que Amancay quiso hacer una reivindicación sobre el papel de la mujer en la música. Otro de los momentos más emotivos fue cuando el grupo interpretó ‘El hombre bolígrafo’ en homenaje al décimo aniversario de su primer álbum y con el cual la banda iba a realizar una serie de conciertos conmemorativos.
Una de las canciones que más nos impresionaron fue su nuevo tema ‘Galdu Arte’ por la fuerza de su directo en este tema interpretado en euskera y que hizo las delicias de todo el público con un estribillo demoledor, moviendo las cabezas y los brazos al son de los brutales sonidos.
‘Azul’ y ‘Veneno’ fueron otros dos de los temas que tocaron de su nuevo álbum, dejando paso a 4 pesos pesados de su repertorio y que ya forman parte de la tradición de la banda en todos sus directos. La arrolladora ‘Animal’, la novedosa y pegadiza ‘Amazonia Arde’, la nostálgica y mítica ‘Parfait’, y la tropical y divertida ‘Avestruz’, que sirvió para cerrar el concierto. Un concierto en el que, como siempre, la conexión entre banda y público fue total.
El cariño, la sinceridad, el buen rollo y las ganas que ponen los guipuzcoanos en todos sus directos siempre es digno de alabar, y desde estas líneas siempre vamos a reconocerlo. Un directo divertido, con fuerza, con mucho ritmo y con muy buenas vibraciones que sigue mostrando la buena forma de este grupo, del que esperemos que, cuando se recupere la normalidad total en festivales, salas y espectáculos, volvamos a ver recorriendo la península presentando este pegadizo nuevo trabajo llamado ‘Talisman’.
