Lourdes está de vuelta. Siempre la esperamos con ansias, sabemos que esta chica es imposible que haga algo malo, ya sea por su voz que siempre cuaja con todo o por el buen gusto que tiene personalmente. La niña bonita del Indie español, ya no es tan niña-jovenzuela, se nota en cada canción, y de su crecimiento nos ha hecho participes. Tan participes que su vida ha ido en paralelo a su música, ese primer ‘I love your glasses’ que presentaba la pureza de una chica totalmente anónima y que todo el mundo quería conocer, dió lugar al luminoso ‘Fuerteventura‘ en el que se notaba mayor presencia instrumental influenciada por sus nuevas compañías, nada más y nada menos que los músicos de Belle and Sebastian. Desde entonces no ha parado de viajar por todo el mundo presentando sus canciones hasta acabar viviendo en Los Angeles, donde reside actualmente, y que con la ayuda del productor Joe Cicarelli ha dado forma a ‘Agent Cooper’ el tercer album de Russian Red.
Cada disco demuestra que es una continua experimentación musical en la que se empapa de todo lo aprendido por los productores con los que trabaja y de las diferentes experiencias que marcan su evolución, demostrado queda en el rumbo que ha tomado actualmente al coger la guitarra eléctrica y darle oportunidad a nuevos sonidos. Pero todo esto es parte del ciclo natural de la vida, poco o nada queda de la chica tímida de 21 años y ropa recatada que después de seis fructíferos años ha dado lugar a la mujer de 27 que es hoy.
‘Casper’ el primer single, refleja todo lo contado anteriormente, la nueva guitarra actúa de roca madre en la canción y su videoclip muestra la faceta mujer de la que hemos hablado, combinada con el estilo americano en el que vive en estos momentos. ‘John Michael’ junto con ‘Anthony’ marcan la segunda descarga de fuerza, seguidas de ‘Alex’ y ‘Stevie J’, que se centran en el pop pulcro y de estribillo pegajoso.
httpvh://www.youtube.com/watch?v=Y9rs-nFfXBY
El reproche significativo que tiene el disco en sí es la introversión de los sentimientos, rota por ‘Xabier’ y ‘Neruda’, que recuerdan más a la época vieja donde transmitía emociones en cada nota y coro, es algo que se echa mucho de menos, hasta en las canciones mas positivas como podían ser ‘Cigarettes’ o ‘I Hate You But I Love You’.
En definitiva, un buen trabajo, pero de corazón frío.
