19 mayo 2024

SidonieA lo largo de los carteles repartidos por Madrid podía ver cómo Sidonie me prometían acudir a la sala Penélope para saludar el sol. Por culpa de una refrescante borrasca no pudo ser lo del sol, pero sí lo de Sidonie. Con un pequeño retraso con respecto a la hora de inicio (algo tristemente normal) aparecían Jesús, Axel y Marc; acompañados por el hammond de Baldo (que lleva con ellos desde Fascinado) y Vicen a la guitarra.

Tras esa espera abrieron con “Nuestro baile del viernes”, en un gesto que me sorprendió, porque estaba convencido de que lo harían con alguna de su último disco. La gente coreaba las letras y desde el primer momento estaba Jesús animando al público, cosa que no paró de hacer en todo el momento. Se les notaba contentos y entregados, tanto, que tras acabar “Bohème” se pusieron a dar la bienvenida al Rock in Río y bromear diciendo que eran Shakira y su banda.

Pasamos ya a sus nuevas canciones con “La Sombra” (muy bien recibida por la gente) y enlazada con “Viva el loco que inventó el amor”, con la que empezaron a ganar marcha y guitarreo con un potente solo (quizá por lo del Rock in Río) hasta acabar en un “Feelin’ Down” que al menos yo, por antiguo, no esperaba. Era la primera vez que en un concierto de ellos la oía, y no desentonaba para nada salvo por el cambio de idioma, que parece ya lejano.

La cosa salía a pedir de boca mientras enlazaban canciones hasta llegar a uno de los momentos especiales de la noche con “Giraluna”. Antes de empezar, Marc advirtió que preparaban algo especial y pidió a los que estaban delante del todo que se sentaran en el suelo. En un principio su propuesta fue recibida con incredulidad, pero poco a poco la gente se iba al suelo mientras Marc salía del escenario y se colocaba con ellos, de pie. El hammond empezó y el resto de la banda se retiró, quedando sólo el rey de los girasoles para cantar una de las más míticas de Sidonie, rodeado de un público que no se lo terminaba de creer y quizá por eso disfrutaba aún más.

Volvió Axel (todo un showman con su pandereta) con una bandeja con chupitos de ron que repartió al grupo y se tomaron a nuestra salud, para seguir con “Todo lo que nos gusta”, “En mi garganta” y las muy bien recibidas “Dandy del extrarradio” y “A la vera del mar”. Llevábamos ya más de diez canciones, pero todavía quedaban unas cuantas por llegar. Tras “Nueva York” nos sorprendieron con la dupla “On the Sofa” + “Fascinado”, que arrancó de la gente aplausos y fue de las más coreadas, para llegar a al supuesto final con la circense “Un día más en la vida” acompañada de una explosión de confetti y terminar con “El adiós”.

Parecía que el espectáculo había llegado a su fin, y de haberlo hecho nadie podría decir que no hubiera valido lo pagado por él, pero quedaba un tramo final. Tras las súplicas de la gente Sidonie volvieron para unos bises en donde abrieron con la imprescindible “Costa Azul”, siguieron con “El Incendio” y cerraron con “Sidonie goes to Moog”, donde se permitieron un rato de experimentación con Jesús y Vicen tocando tirados en el suelo. Quizá un poco autocomplaciente y cargante, pero se lo habían ganado. Con los compases finales explotó una lluvia de chispas en el escenario y se despidieron como lo hacen en el teatro. Con ese buen sabor de boca, ahora sí había terminado la función.

fotografía de la actuación de Sidonie en Valladolid por juanignaciosl