19 abril 2024

Band-Of-Skulls-Himalayan-album-cover3

A pesar de que la nueva ola de blues capitaneada por Jack White y los Black Keys no les ha servido para conseguir una mayor notoriedad entre los seguidores de aquellos (y menos para acomodarse), estos desconocidos que responden al nombre de “Band Of Skulls” son una de las bandas de rock a reivindicar de nuestra cada vez mas avanzada década.Máxime con la publicación de su tercer disco que consolida su breve trayectoria que arrancó en Londres a finales del 2008 de la mano de Russell Marsen (voces y guitarra), Emma Richardson (voces y bajo) y Matt Hayward (batería). Desde sus inicios el combo de Southampton apostó fuerte por el blues y el garage, con unos pulidos juegos de voces chica-chico y  con un poderío eléctrico de imprevisible desarrollo.

El resultado de todo ello ofrece algo que sus coetáneos raramente son capaces: causar la sorpresa en el rock. Y ello lo logran a través de unas canciones de formas multiformes firmadas por esta tripla de  insaciable creatividad.

Ejemplo de ello los tenemos en su último trabajo en el que los matices son de todos los sabores, exquisitos claro está. Empezando por el dulce pop de “Nightmares”, al flamenqueo y los ritmos africanos apetitosos de “Toreador”, por no hablar  de las saladas guitarras funkys de “Himalayan”.

El blues mas comercial lo trae “Brothers & Sisters” con su riff que nada entre Franz Ferdinand y los Black Keys, y un piano que es cuanto menos memorable.

En cambio en “I Guess I Know You Fairly Well”  a quien recuerdan es a los últimos Arctic Monkeys y a su rythm ‘ n blues oscuro, mientras el inicio de “I Feel Like Ten Men, Nine Dead And One Dying” es muy Miles Kane a pesar que luego se enclava en unos inquietantes rasgueos metaleros.

Splendour Studio

El sosiego llega “You Are All That I Am Not”,  una inocente balada a dos voces con crescendos, pasajes revoltosos eléctricos y un estribillo fácil de recordar. Muy noventera. Otra de las apaciguadas es la ambiental “Cold Sweet”, con algo de épica, mucho de dream-pop y algún temporal guitarrero de por medio.

Son algunos de los ingredientes de un discazo construido con bases rockeras, que crece y crece con las escuchas. Un disco que a la postre bien vale los lingotes de oro de su portada.

PD: El disco incluye un hidden track, una pieza rockera “Be Mine”, para lo que os tendréis que comprar el disco ya que en Spotify ni en deezer lo encontraréis.