
Sala Black Bird, Santander. Nos cuesta encontrarla pero llegamos. Hace calor fuera y nos han avisado de que dentro la temperatura no será mucho más agradable. Vamos a ver a Dinero y a 45 grados, mientras tanto, esperamos con ganas a que abran las puertas. Son las 21:15 y mientras estamos con nuestra primera cerveza suben al escenario los cántabros 45 grados, un grupo muy joven: delgaduchos, altos y con buen pelo, esa es la primera impresión. Se cargan la guitarra y el bajo y se sienta el batería. ¿Y ya está? Si, esta noche va de tríos. La sala en silencio y a medio llenar. Empieza a sonar una introducción que para nada tiene que ver con lo que recordaba de su actuación teloneando a Supersubmarina en Valladolid. Un sonido profundo, fuerte e intenso, incluso el guitarrista soplando las cuerdas. Está claro que han cambiado, ahora el sonido es más maduro y contundente. Nos regalaron un setlist de 10 temas algunos nuevos- en unos 40-45 minutos mientras la sala cogía, aun, más temperatura. Incluyeron una instrumental que nos dejó a todos boquiabiertos. Se nota que han pasado horas y horas en el local de ensayo. Coros, ritmos de batería y riffs de lo más pegadizos hicieron que 45 grados estuviesen a la altura.
Sobre las 22:20 hace su aparición Dinero. El público después del precalentamiento- se acerca más al escenario para disfrutar de la fuerza a la que nos tienen acostumbrados estos tres chicos en sus directos y una vez más, no fallan. Arrancan con potencia, Que más da, Utópicos Anónimos y El momento Perfecto, una parada para saludar y sigue el concierto. Entre el calor de la sala y lo que se mueve Dinero en el escenario aquello parecía una sauna. Desplegaron todo el arsenal de su disco homónimo, Vaya Panorama, Mentiras y su característico parón cuando se acerca el shhhhh en el que todo el mundo pide más -, Trastorno Bipolar, El fin del Mundo, No Puedo Explicarlo Mejor (ni quiero) y como no, la canción con la que cualquiera se vuelve loco y la sala tiembla: En Invierno. Podría decir que no había nadie sin tararear esta letra. No podía faltar alguna de su primer EP y la elegida fue Duelo de Titanes, posiblemente la menos conocida entre los asistentes. También nos deleitaron con una canción muy pegadiza- que estará en su próximo álbum llamada Tal Vez.
Todos se sabían las letras, todos bailaron de principio a fin y de nuevo, todos disfrutamos del concierto de este trío que no para de recorrer España de punta a punta. Lo que no sabemos es cómo aun tienen fuerza para entregarse de tal forma en los conciertos. La canción final fue, como habréis deducido ya, Saboreal. Esa balada con cojones -como dice Sean- que puso la guinda final a un concierto de una hora larga a un ritmo frenético.
Pero no se acaba aquí, después siguió la fiesta por Santander, el buen rollo y la cercanía que caracteriza a Dinero. Ahora mismo están -en un lugar alejado de la ciudad- componiendo los nuevos temas de su próximo disco y, a la vez, continúan con su gira de un lado al otro del país, como siempre, sin parar quietos. Esos son Dinero.
Muchas gracias por la crónica y por estar presentes el sábado pasado en Santander!
Aquí tenéis algún vídeo de nuestro bolo (gracias a Depelotis):
http://www.youtube.com/watch?v=sug0mG0dm1M
http://www.youtube.com/watch?v=yGdozRajaQw&feature=related
http://www.myspace.com/cuarentaycincogrados