19 abril 2024

16 meses más tarde, Love of Lesbian pudo decir,

“Buenas noches Madrid”

 

Sin duda, todo este tiempo fuera de los escenarios se ha hecho para muchos, largo. Pero Love of Lesbian vuelve y como siempre, lo hace a lo grande. Tres días seguidos con el cartel de Sold Out colgado en la puerta de la Riviera desde hace semanas, son la demostración de que la gira de su octavo disco, El Poeta Halley, tiene mucho que ofrecer a sus fans de toda la vida y a todos aquellos que ya han acogido sus letras y se han enganchado a la magia de los nuevos temas de este álbum con el que nos han sorprendido los barceloneses en este 2016.

love-of-lesbian-2015

Y como auguraba Santi Balmes tras las dos primeros canciones, fueron buenas noches para todos. Para ellos, por empezar a rodar subidos a un cometa que seguro les va a llevar lejos y para un público entregado que cantó con la misma intención El Planeador, que Allí donde solíamos gritar. Eso sí, fue a partir de sonar la ya legendaria, 1999, cuando La Riviera no paro ni un segundo. Brazos arriba, bailes, gritos y muchos recuerdos en forma de canción que llegaron a superar los decibelios permitidos cuando sonó, como no, John Boy.

Y a esa mezcla perfecta entre las novedades y las canciones que han hecho grande a la banda, como ocurre siempre en el caso de Love of Lesbian, se sumaba la escenografía y  una cuidada puesta en escena en la que se echó de menos el surrealismo con el que nos tenía acostumbrado el Amante Guisante y sus capas metálicas.

Ayer, en Madrid hubo de todo, desde un momento para dedicar la canción Seres Únicos a Prince, unos Océanos de Sed que hubo que empezar de nuevo porque algo “sonaba raro”, un primer vis en el que la banda volvió con mucha fuerza para compensar los 5 minutos que el público estuvo pidiéndoles que no se fueran y un último vis, con el que cerraron su primer concierto cósmico al ritmo de El Ciclo Lunar de Halley Star.

Estamos seguros de que esto no ha hecho nada más que empezar.

 

Texto: Victoria Iglesias.