No sé por donde empezar, con esta ironía comenzó el concierto que el pasado sábado ofreció Lapido en Valladolid. En torno a las 22:30 h Jose Ignácio Lapido subió al escenario junto al gran Víctor Sánchez a la guitarra, Raúl Bernal a los teclados y Popi González a la percusión (batería sin bombo). José Ignacio Lapido comenzó el 14 de abril en Córdoba una gira de conciertos en teatros que lleva por 11 ciudades españolas en formato electro-acústico.
La idea de hacer esta gira surge al acabar los conciertos de presentación del ultimo disco de Lapido, De sombras y sueños, y es así como vuelve a Valladolid (tras varios años), esta vez a la Sala Porta Caeli.
Temas de Lapido y 091 se fueron intercalando en la noche vallisoletana, El Espantapájaros no faltó.
Tras la antesala del dolor nos encontramos con el primer bis de la noche, donde el curateto interpretó Nubes con forma de pistola. Hasta entonces amplio repaso a temas De sombras y sueños, último trabajo hasta la fecha del poeta électrico. Lapido tiene medio preparadas las canciones de su nuevo disco, falta terminarlas con la banda, hay planes para meterse en estudio en verano y así a final de año tener nuevo disco.
Hubo momento para un segundo bis en el que para poner broche final (y de lujo) a la noche con la interpretación del gran tema de 091, La Torre de la vela. Y claro que sabemos donde buscar al Maestro, sobre los escenarios y bien acompañado por su gran banda.
Gran concierto de 2 horas de duración, donde Lapido dio lo mejor de si y no brindó una gran noche. Lástima que tan solo algo más de un centenar de personas disfrutásemos de ello.
