29 marzo 2024

Desde el mes de Abril de este mismo año Panini publica la que es la nueva serie regular del Poderoso Thor (o simplemente Thor). Y digo nueva serie porque supone el retorno de la muerte de este personaje, lo que, por otro lado, no es ninguna novedad en el mundo del cómic en general y del universo Marvel en particular.
Thor es un personaje que responde a ese intento de juntar el mundo heroico propio de las mitologías clásicas con el nuevo conjunto de héroes o “dioses” actuales. Dentro de este marco nos podemos encontrar a personajes como Wonder Woman dentro de DC, o a Hércules, la Valkiria o Ares dentro de Marvel.

thorv2002007_col_mini.jpgThor es probablemente uno de los mayores iconos dentro de Marvel. Es uno de los héroes más poderosos de este universo (lo de Dios del Trueno no sólo sirve para fardar delante con las chicas en los bares) y uno de los fundadores de los Vengadores. Pero, como no podía ser de otro modo en Marvel, también tenía sus problemas. El primero y más evidente era el de tener que lidiar con su papel de héroe en la tierra junto con su papel de dios en Asgard. Esto provocaría que Thor siempre fuese un personaje algo alejado de la realidad de la Tierra. Su moral y sus creencias chocarían más de una vez con otros personajes a la vez que su amor por los humanos normales (si es que a Spiderman, Ironman y compañía se les puede llamar normales) harían que no fuese bien recibido por sus compañeros dioses dentro de Asgard. Fue precisamente su papel como Hijo de Odín y dios asgardiano lo que provocó su final, junto con el de sus compañeros del panteón de dioses nórdicos. El Ragnarok, la batalla final entre dioses y gigantes nórdicos, sumía a todos en un aparente ciclo muerte y resurrección que estaba destinado a repetirse por los siglos de los siglos, amén. Hasta aquí, nada fuera de lo normal. Los dioses de Asgard tenían su destino cruel y épico escrito para siempre, el único problema es que Thor, cansado de todo ese rollo mitológico, decidió romper el ciclo, lo que provocó la desaparición absoluta de Asgard y de todos sus habitantes.

Hasta ahora. Tres años después de que en Marvel decidiesen dar un descanso al Dios del Trueno y a toda su panda de amigotes, se relanza la serie de manos de dos de los mejores autores dentro del panorama del cómic actual: Joseph Michael Straczynski en los guiones (Babylon 5, Supreme Power) y Olivier Coipel (Dinastía de M) a los lápices. En los tres números que llevamos en nuestro país ya ha quedado bastante claro que es lo que pretende hacer el bueno de Straczynski con este personaje. La serie es un intento de juntar nuevos conceptos con los viejos. Por un lado tenemos el retorno de Donald Blake, el alter ego de Thor en sus primeras andaduras por la Tierra, y por otro lado tenemos a un Thor completamente solo, sin un Asgard al que regresar y frente a una comunidad superheroica dividida por la reciente Civil War (ya sabéis, Ironman VS Capitán América, al final lo de registrarse es lo guay, etc, etc). Así, el primer paso del personaje es el de reconstruir Asgard y hacer que vuelvan los que fueron sus habitantes. Porque Thor no es nadie sin Asgard, y Asgard no puede existir sin Thor. A esto hay que sumarle el hecho de que Thor pretende establecerse de una manera más determinada y clara en la tierra, así que ¿Qué mejor manera de hacer todo eso que trayendo Asgard a la tierra, concretamente a Oklahoma? Straczynski nos transporta así por una historia lenta pero firme, en la que pretende asentar el nuevo status quo del personaje sin dejar ningún cabo suelto. Primero vemos como vuelve Thor, luego como vuelve Asgard, y ahora toca hacer volver a los dioses asgardianos, y si de paso hay que partirle la cara a aquellos que insultaron el recuerdo de Thor mientras este no estaba pues se parte, que el Dios del Trueno tiene para todos, oiga.

Para terminar sólo apuntar que en el apartado gráfico Coipel cumple a la perfección. Este hombre ha nacido para dibujar a superhéroes que parecen armarios empotrados, con esas mandíbulas cuadradas y esas espaldas extremadamente anchas. El dibujo es claro y directo, sin detalles que distraigan y centrándose en la acción que se da en cada momento. Quizás le falta un poco de sensación de fluidez, pero en general es un dibujo perfecto para esta serie.

La verdad es que esta serie me ha sorprendido. Se encuentra un poco al margen del resto del universo Marvel y es un poco lenta al principio, pero se agradece esa “falta de velocidad” si se tiene en cuenta que sirve para que todos los cabos queden bien atados para así poder disfrutar de uno de los personajes más épicos y complejos dentro del universo Marvel. Thor ha vuelto y ya no se contendrá más. Agarraos porque la tormenta va a ser de las gordas porque ya se sabe que “la calma precede a la tempestad”.

 

¡BRAKKA-BOOOM!