These Charming Men : Crónica del concierto de Spoon en Madrid . Sala La Riviera. Noviembre 2017.
Hablar de los texanos Spoon es hablar de uno de los tesoros más prolíficos de la música alternativa americana. Una banda que a través de las décadas ha conseguido reinventarse y mirarse desde todos los ángulos para pulir todas las aristas y albergar una pulcritud excelsa en la ejecución de álbumes y directos.
Su nuevo paso por nuestra geografía, tras recalar en la pasada edición del Mad Cool con un rotundo éxito de afluencia, llegaba a la Sala La Riviera. Templo por excelencia catapultador de bandas medianas a plazas mucho mayores, escenario que realza los defectos y las virtudes del sonido al por mayor. Y en las segundas es donde sobresalieron los Spoon, en una ejecución concisa, elegante, directa, vibrante y apabullante que resumío su discografía en algo más de noventa minutos en los que la parroquia logró la perfecta sintonía con los de Austin.
Britt Daniel y los suyos no dudan, y espetan de primeras uno de los temas más completos de “Hot Thoughts”, ‘Do I Have To Talk You Into It’, un aire más cercano al funk que al rock, que continuaban con esa clase de estilo a ritmo de ‘Inside Out’ (“They Want My Soul”, menudo disco el anterior de los de la cuchara…) perfectamente enlazada con ‘I Turn my Camera On’, como para no encender cámara, ojos y todos los sentidos ante tan inminente consecución de distinción.
It hit me like a tom
You hit me like a tom
On on and on
Y es que da igual hacer ojitos a ritmos dub, al post-punk o al rock clásico, incluso pulsos eléctricos se destilan por los Spoon, todo ello confluye en su repertorio a medida que retruenan los misiles de su setlist. Experimento exitoso con ‘WhisperI’lllistentohearit‘ y glorioso ritmo que hace contonearnos junto al señor Daniel en ‘Don´t You Evah’ ( palmadas al aire marcando estribillo y flow a mansalva).
Que elegancia la de #spoon en #madrid @livenationesp @everlastingrecords @spoonikbcn
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Más que una presentación de su último disco al uso nos embarcaron en una travesía por su discografía, recuperando clásicos tan celebrados como ‘Everything Hits At Once‘, intensificando cortes tan enérgicos y complejos como ‘My Mathematical Mind’, juguetones y ahondando en la progresiva, acertando en cada ejecución. Normal que si nos cantan eso de ‘Can I Sit Next To You’ se nos caiga la baba y le dejemos el mejor sitio que podamos ofrecerles; eso sí con la condición de que nos saquen a bailar y botar como si fuera un ‘miernes’ a ritmo de ‘The Underdog’ y ‘Got Nuffin’ con sus riffs envenenados.
Tampoco se quedan cortos los caballeros en los bises, lucimiento para el frontman en una íntima interpretación de ‘I Summon You’ y celebración masiva con la banda y el público por bandera sonando más a Caribou que a Spoon en ‘Pink Up‘. De regalo dos tazas, ‘Hot Thoughts’ y ‘Rent I Pay’, seguro que el boca a oreja no dejará a estos maestros en una sala a medio gas en su próxima visita, y si eso pasa diré eso de I Just Don´t Understand.
