26 abril 2024

29 de abril. Viernes noche en Barcelona. La cita indiscutible, dentro del abanico de ofertas casi eterno que ofrece esta ciudad, es sin lugar a dudas en la sala KGB del barrio de Gràcia, dentro del clico de Heineken Music Selector. La razón es simple, tocaba uno de los grupos que más ha destacado dentro del panorama independiente del rock nacional: Pony Bravo.

Pony BravoPony Bravo ha conseguido destacar no solo por su política transgresora a la hora de publicitarse o tratar sus discos (todos en descarga gratuita desde su web, en buena calidad). No, también ha conseguido destacar porque se arriesgan con un estilo de música propio. Un estilo hipnótico, de ritmos que te hacen sumergirte en un sueño tenso, casi eterno. Un estilo que suena un sur oscuro y psicodélico. Pero lo mejor es que es un grupo que en directo gana, y mucho. Durante algo más de una hora consiguieron que todo el público bailase bajo sus ritmos, completamente abstraídos, como si fueran participantes de un ritual exótico.

Pony Bravo tampoco lo pone fácil. Durante el concierto no sonaron algunas de sus grandes canciones del primer disco, aunque sí muchas del segundo, como La Voz del Hacha o Ninja de Fuego. Puede que no escuchásemos su canción homónima, Pony Bravo, pero como regalo tuvimos una canción nueva, que hará las delicias de los fans más fervientes. Y por supuesto, para la traca final tuvimos la grande La Rave de Dios, o por lo menos antes de su bis con China da Miedo.

PS I Love YouLo gracioso es que hicieran bis, porque en teoría Pony Bravo no era el grupo principal de esa noche, si no que eran los teloneros de PS I Love You, la banda canadiense que está de gira por Europa durante estas fechas. Pero estaba claro que la mayoría de la gente fue a ver Pony Bravo.

PS I Love You, por su parte, hizo gala de su rock con toques post-punk y sobre todo mucho noise. Su directo destaca por amplificar el efecto ruido de su disco, Meet Me At The Muster Station. Es curioso ver a solo dos personas haciendo ese despliegue de potencia sonora. En directo, además de más potentes, son fieles a sus canciones, sin casi sorpresas. Se notaba que era su primera gira europea, o si no no me explico esa aparente timidez en el escenario. En general son un grupo recomendable, pero que les falta un empujón para dar un mejor directo.

En general fue una buena noche de ritmos contantes, sugerentes y mucho lo-fi.